Por: Redacción Actualidad • Colombia.com

Redada policial contra las drogas en favela de Río de Janeiro deja 25 muertos

Redada policial contra las drogas en favela de Río de Janeiro deja 25 muertos, en la acción participaron más de 200 efectivos y se cuestiona su legalidad debido a que un alto superior federal las prohibió mientras exista la pandemia.

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Efectivos de la policía brasileña vigilan las estrechas calles de las favelas de Río de Janeiro en medio de una operación contra bandas criminales. Foto: Twitter @elindepepy
Efectivos de la policía brasileña vigilan las estrechas calles de las favelas de Río de Janeiro en medio de una operación contra bandas criminales. Foto: Twitter @elindepepy

Redada policial contra las drogas en favela de Río de Janeiro deja 25 muertos, en la acción participaron más de 200 efectivos y se cuestiona su legalidad debido a que un alto superior federal las prohibió mientras exista la pandemia.

En una operación policial de gran magnitud, la policía brasileña llevó a cabo un operativo especial destinado a desarticular una poderosa red de tráfico de drogas del denominado Comando Vermelho, la mayor red criminal de Brasil y que se dedica al narcotráfico, secuestro y extorsión, entre otros delitos y tiene ubicación en la favela de Río de Janeiro conocida como Jacarezinho, ubicada al norte de la ciudad.

La operación inició con el registro y allanamiento de varias residencias y los vecinos cuentan a los medios que se registraron disparos, entre las víctimas mortales se cuenta un agente de policía al que le dispararon en la cabeza, mientras que los civiles fallecidos eran apilados en vehículos oficiales y también se vio a varias unidades policiales sacar cuerpos en sábanas blancas, dificultando el trabajo de los médicos forenses.

El gobernador del estado de Río de Janeiro, Cláudio Castro, tiene una política oficial de seguridad consistente en atacar directamente a los grupos de narcotraficantes que operan en las populosas y deprimidas zonas de la ciudad, conocidas como favelas, cinturones de miseria en donde el narcotráfico ha encontrado por décadas en lugar perfecto para organizar, extender y fortalecer su accionar.

Las favelas eran tradicionalmente lugares en los cuales la policía había tenido vetado el ingreso, por lo tanto, reinaba adentro el caos de las disputas entre narcotraficantes por el control de los territorios y de los negocios ilícitos, además encontraba en los jóvenes de la población, elementos fáciles y seguros de incluir en su aparato delincuencial.

Se ha cuestionado el accionar policial y los habitantes se quejan del abuso de estos, se ha denunciado incluso que los policías llegaron disparando, sin importar si sus víctimas eran niños, pero los organismos de seguridad afirman que, al llegar a la zona para adelantar su trabajo, fueron recibidos a disparos por miembros de la delincuencia organizada que opera en la zona bajo el mando de poderosos narcotraficantes.

La polémica se ha desatado después de esta operación porque el Supremo Tribunal Federal había prohibido este tipo de operaciones durante la pandemia, “salvo en hipótesis excepcionales” justificadas ante la Fiscalía de Rio de Janeiro.

La violencia en la ciudad no se ha detenido con la pandemia y la policía afirma que los asesinatos relacionados con acciones de narcotraficantes han sido de 30 en menos de un mes, lo que tiene en alerta a las autoridades, que quieren cortar de raíz el problema, vecinos denunciaron a los medios que más de 200 policías fuertemente armados y custodiados irrumpieron con sus rostros cubiertos con pasamontañas e ingresaron a varias casas, al parecer determinadas con anterioridad.

La operación policial es la segunda más sangrienta de la historia del estado y muchos ya se empeñan en llamarla “masacre”.