Por: Willmary Montilla • Colombia.com

Trasladarán féretro de Isabel II al Palacio de Buckingham

El ataúd de Isabel II será trasladado al Palacio de Buckingham, en Londrés. Así lo confirmó un vocero de la Casa Real Británica.

Actualización
"Dios salve a la Reina", son las estrofas que resuenan entre los británicos. Foto: Twitter
"Dios salve a la Reina", son las estrofas que resuenan entre los británicos. Foto: Twitter

El ataúd de Isabel II será trasladado al Palacio de Buckingham, en Londrés. Así lo confirmó un vocero de la Casa Real Británica.

Tras permanecer en capilla ardiente en la Catedral de St Giles, en Edimburgo, el féretro de la reina Isabel II será trasladado a su Palacio de Buckingham, en Londres. Será trasladada en avión y llegará a la base militar de Northolt, para el funeral en la Abadía de Westminster. 

Según detalla un comunicado emitido por el Palacio de Buckingham, el plan de viaje estará coordinado por la princesa Ana, hija de Isabel II, acompañada del vicealmirante Sir Tim Laurence estarán acompañando al ataúd durante su viaje desde Escocia. 

La comitiva fúnebre y la Guardia de Honor estará formada por el Escuadrón de Color de la reina y se mantendrá en la base, hasta que se marche el cortejo fúnebre. Está previsto que la Banda militar del Real Regimiento escocés interpretará un verso del himno nacional cuando parta el avión.

El cortejo fúnebre recorrerá los enclaves de la capital hasta llegar a Buckingham que serán Marbel Arch, Park Lane, Hyde Park Corner, Constitution Hill, Centre Gate, Eastbourne Terrace, Lancaster Gate y Centre Arch. El ataúd llegará a la sala Bow del Palacio, donde se realizarán los actos fúnebres. A través del camino conocido como el Long Walk, continuará el último servicio religioso antes de que Isabel II reciba cristiana sepultura.

Se estima que para el funeral de la reina Isabel II asistan importantes líderes del mundo, entre esos, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden. El Rey Carlos III y los miembros de la Familia Real participarán en la procesión y en un servicio religioso se quedará allí, en la capilla ardiente con los demás representantes del Palacio para despedirla. 

"Dios salve a la Reina", son las estrofas que resuenan entre los británicos que prestan sus voces para homenajear y la angustia. Los más afectados con la partida, dejan ofrendas florales y algunos desaforados, se han trepado sobre las estatuas en un estado de conmoción. 

Hay que recordar que desde que los británicos se enteraron del estado crítico de salud de la reina Isabel II, muchos de ellos se congregaron en el Palacio de Buckingham para honrar con oración a la soberana, que no pudo salir de su cuadro de salud y dejó esta existencia terrenal.