Ejecutan a 17 pilotos en Libia por no atacar a manifestantes
Tras perder el control en las ciudades del oriente de Libia, el líder Muamar al Gadafi sigue recrudeciendo las represiones para no perder la otra mitad del país.

Foto: EFE
Tras perder el control en las ciudades del oriente de Libia, el líder Muamar al Gadafi sigue recrudeciendo las represiones para no perder la otra mitad del país.
Este miércoles 17 pilotos de la Fuerza Aérea de Libia fueron ejecutados en Trípoli tras negarse a bombardear la ciudad de Zauia, a 44 kilómetros de la capital.
El mismo caso se repitió en horas de la mañana cuando un avión de combate de construcción rusa Sukhoy 22 se estrelló en la región de Jedabia luego que sus dos pilotos saltasen en paracaídas tras rehusar la orden de bombardear la ciudad de Bengasi.
Por otra parte, el régimen del coronel Gadafi comienza a presentar fisuras, pierde una parte de sus principales apoyos y también el control sobre una porción del territorio.
Informaciones cada vez más insistentes y que provienen de diferentes fuentes confirman que amplias zonas del país empiezan a estar fuera del dominio del régimen de Trípoli.
Un periodista libio que trabaja en Bengasi, la segunda ciudad del país con más de 1,5 millones de habitantes, informó este miércoles de que la zona comprendida entre las fronteras de Egipto y la localidad de Jedabia escapa al control de Trípoli.
En unas declaraciones a la cadena de televisión por satélite quatarí, Al Jazira, el periodista ha citado textualmente las ciudades de Begasi, Derna, El Beida, Mesrata, Tobruk y El Merdj y ha asegurado que todas estas localidades han sido "liberadas".
Esto ha sido confirmado hoy por el jefe de la diplomacia italiana Franco Frattini, y por el ministro libio de Justicia Mustafá Abdeljalil, que dimitió hace tres días para protestar por la represión contra los manifestantes.
En la ciudad de Bengasi, según el diario electrónico Quryna, las autoridades locales han desistido de ejercer sus funciones bajo la presión de la calle y los habitantes han decidido tomar en sus manos los asuntos de la ciudad.
Comités denonimados "populares" se han constituido para resolver algunas cuestiones, tales como la recuperación de las armas utilizadas por algunos manifestantes en asaltos contra los cuarteles y comisarías de policía.
Asimismo se han hecho cargo de la protección de los bienes públicos y privados así como de la mentalización de los comerciantes para que abran sus negocios y eviten aumentar el precio de los productos alimenticios.
La mayor fragilidad del régimen de Gadafi se ha materializado por la dimisión del ministro del Interior, y antiguo compañero de armas, el general Abdelfatah Younes El Abidi.
Se trata del tercer miembro del gabinete que dimite tras los ministros de Justicia y de Emigración, como reacción a la violenta represión de la población libia.
El Abidi, que también es el comandante en jefe de las fuerzas especiales, ha anunciado que deja todas las funciones oficiales y ha hecho un llamamiento a los soldados y a las fuerzas del orden para alinearse con la "revolución".
Este general ha confirmado las intenciones genocidas del líder libio al indicar, en una declaración al diario Quryna, que Gadafi le ha informado personalmente de un plan para bombardear la población de Bengasi y que le ha suplicado no ejecutarla.
Por otra parte, según las mismas fuentes, un avión de combate de construcción rusa Sukhoy 22 se ha estrellado hoy en la región de Jedabia luego que sus dos pilotos saltasen en paracaídas tras rehusar la orden de bombardear la ciudad de Bengasi.
La salida del ministro del Interior y de sus dos colegas estuvo precedida por la de numerosos diplomáticos y embajadores libios y por numerosos oficiales y tropa del Ejército que han anunciado que se unen a los contingentes de manifestantes.
Incluso el entorno más próximo del hijo mayor de Gadafi, Seif El Islam, se ha visto influido por el movimiento de contestación, ya que uno de sus más cercanos colaboradores, identificado como Youcef Souana, ha roto con el régimen de Trípoli y se ha unido a los "revolucionarios".
Gadafi y su entorno están acusados de asesinar a centenares de personas y según un balance hecho público hoy por Sayed El Shanuka, representante libio en la Corte Penal Internacional, CPI, al menos diez mil personas habrían perdido la vida y otras 50.000 han sufrido heridas de diversa consideración desde el comienzo de las manifestaciones en este país magrebí. EFE
El mismo caso se repitió en horas de la mañana cuando un avión de combate de construcción rusa Sukhoy 22 se estrelló en la región de Jedabia luego que sus dos pilotos saltasen en paracaídas tras rehusar la orden de bombardear la ciudad de Bengasi.
Por otra parte, el régimen del coronel Gadafi comienza a presentar fisuras, pierde una parte de sus principales apoyos y también el control sobre una porción del territorio.
Informaciones cada vez más insistentes y que provienen de diferentes fuentes confirman que amplias zonas del país empiezan a estar fuera del dominio del régimen de Trípoli.
Un periodista libio que trabaja en Bengasi, la segunda ciudad del país con más de 1,5 millones de habitantes, informó este miércoles de que la zona comprendida entre las fronteras de Egipto y la localidad de Jedabia escapa al control de Trípoli.
En unas declaraciones a la cadena de televisión por satélite quatarí, Al Jazira, el periodista ha citado textualmente las ciudades de Begasi, Derna, El Beida, Mesrata, Tobruk y El Merdj y ha asegurado que todas estas localidades han sido "liberadas".
Esto ha sido confirmado hoy por el jefe de la diplomacia italiana Franco Frattini, y por el ministro libio de Justicia Mustafá Abdeljalil, que dimitió hace tres días para protestar por la represión contra los manifestantes.
En la ciudad de Bengasi, según el diario electrónico Quryna, las autoridades locales han desistido de ejercer sus funciones bajo la presión de la calle y los habitantes han decidido tomar en sus manos los asuntos de la ciudad.
Comités denonimados "populares" se han constituido para resolver algunas cuestiones, tales como la recuperación de las armas utilizadas por algunos manifestantes en asaltos contra los cuarteles y comisarías de policía.
Asimismo se han hecho cargo de la protección de los bienes públicos y privados así como de la mentalización de los comerciantes para que abran sus negocios y eviten aumentar el precio de los productos alimenticios.
La mayor fragilidad del régimen de Gadafi se ha materializado por la dimisión del ministro del Interior, y antiguo compañero de armas, el general Abdelfatah Younes El Abidi.
Se trata del tercer miembro del gabinete que dimite tras los ministros de Justicia y de Emigración, como reacción a la violenta represión de la población libia.
El Abidi, que también es el comandante en jefe de las fuerzas especiales, ha anunciado que deja todas las funciones oficiales y ha hecho un llamamiento a los soldados y a las fuerzas del orden para alinearse con la "revolución".
Este general ha confirmado las intenciones genocidas del líder libio al indicar, en una declaración al diario Quryna, que Gadafi le ha informado personalmente de un plan para bombardear la población de Bengasi y que le ha suplicado no ejecutarla.
Por otra parte, según las mismas fuentes, un avión de combate de construcción rusa Sukhoy 22 se ha estrellado hoy en la región de Jedabia luego que sus dos pilotos saltasen en paracaídas tras rehusar la orden de bombardear la ciudad de Bengasi.
La salida del ministro del Interior y de sus dos colegas estuvo precedida por la de numerosos diplomáticos y embajadores libios y por numerosos oficiales y tropa del Ejército que han anunciado que se unen a los contingentes de manifestantes.
Incluso el entorno más próximo del hijo mayor de Gadafi, Seif El Islam, se ha visto influido por el movimiento de contestación, ya que uno de sus más cercanos colaboradores, identificado como Youcef Souana, ha roto con el régimen de Trípoli y se ha unido a los "revolucionarios".
Gadafi y su entorno están acusados de asesinar a centenares de personas y según un balance hecho público hoy por Sayed El Shanuka, representante libio en la Corte Penal Internacional, CPI, al menos diez mil personas habrían perdido la vida y otras 50.000 han sufrido heridas de diversa consideración desde el comienzo de las manifestaciones en este país magrebí. EFE
Artículos Relacionados
Fútbol • FEB 23 / 2011
Exportero de la selección Libia asegura que Gadafi "era un tipo bárbaro"
Actualidad • FEB 23 / 2011
Pilotos de avión militar en Libia deciden estrellarse antes de atacar a manifestantes
Actualidad • FEB 22 / 2011
Gadafi dice que no abandonará el poder
Actualidad • FEB 22 / 2011
Gadafi no abandonará el poder y está dispuesto a morir en Libia
Actualidad • FEB 21 / 2011
Aviones militares disparan contra manifestantes en Trípoli
Actualidad • FEB 21 / 2011