Colombia ocupa el puesto 66 en capital humano según el Banco Mundial

El HCI en inglés o el ICH en español, es el Índice de Capital Humano con que el Banco Mundial realiza una clasificación en 174 países del mundo y a Colombia se le adjudicó uno de 0,56, esto significa que un niño en el país actualmente solo puede alcanzar un 56% de posibilidades de su capital humano potencial, situación diferente en países con mayor desarrollo.

La situación de la pandemia ha generado que las desigualdades de hagan más grandes y notorias, esto debido a la difícil situación económica que atraviesan los países pobres y los emergentes.
Colombia ocupa la posición 66 por debajo de México, Perú, Costa Rica y Chile, pero por encima de Argentina, Brasil, Ecuador, Panamá y Uruguay. El listado lo encabeza Singapur, quien lleva ya un par de años al frente y en esta ocasión su índice fue de 0,88.

David Malpass, presidente del Banco Mundial considera que el capital humano es absolutamente vital para el futuro financiero y económico de un país, así como para el bienestar social.
Los indicadores que toma el Banco Mundial para realizar esta medición son tres: supervivencia, escolaridad y salud.

En el primero la pregunta de referencia es si un niño nacido hoy llegará a la edad escolar; el segundo tiene las preguntas sobre cuánto durará su escolarización y cuáles serán sus logros, mientras que para el tercero la pregunta es si el niño dejará el sistema con buena salud y estará listo para continuar sus estudios o podrá ingresar al mercado laboral en edad adulta.

Según los análisis del Banco Mundial, antes de la pandemia, la mayoría de países tuvo un progreso en la creación de capital humano infantil, especialmente en los países más pobres, pero con la llegada de la pandemia, cerca de mil millones de niños han dejado de recibir clases, lo cual ha representado un aumento en la deserción escolar y la disminución del aprendizaje.

La situación golpea más a las niñas, dice el análisis, como un impacto desproporcionado con relación a los hombres.

Desde la llegada de la pandemia, los niños han sido uno de los grupos más afectados teniendo en cuenta que muchos han dejado de asistir al colegio por el cierre de los establecimientos educativos, pero muchos otros han decidió desertar y es probable que al finalizar la situación por la crisis del COVID-19, sea difícil su reincorporación.

Este análisis del Banco Mundial es prueba de que el coronavirus ha impactado con especial dureza a los países más pobres y vulnerables, mientras que en los más ricos, su sistema ha garantizado mantener buenas posibilidades de progreso en sus habitantes.