Por: Redacción Actualidad • Colombia.com

Comerciantes de Suba se declaran en desobediencia y no cierran sus negocios

Comerciantes de Suba se declaran en desobediencia y no cierran sus negocios a pesar del confinamiento general declarado por la Alcaldía de Bogotá desde las cero horas del sábado 10 de abril hasta las 4 de la mañana del martes 13.

En la localidad de Suba la población que muestra con trapos rojos su necesidad de ayuda por falta de recursos para alimentación crece cada día. Foto: Twitter @BluRadioCo
En la localidad de Suba la población que muestra con trapos rojos su necesidad de ayuda por falta de recursos para alimentación crece cada día. Foto: Twitter @BluRadioCo

Comerciantes de Suba se declaran en desobediencia y no cierran sus negocios a pesar del confinamiento general declarado por la Alcaldía de Bogotá desde las cero horas del sábado 10 de abril hasta las 4 de la mañana del martes 13.

Los comerciantes de la localidad bogotana de Suba no quieren cerrar sus negocios durante este confinamiento determinado por la Alcaldía Mayor de Bogotá, la administración de la capital de la República permite que solo los establecimientos comerciales de productos de primera necesidad como venta de alimentos, supermercados y droguerías puedan atender al público manteniendo sus puertas abiertas.

Los comerciantes de Suba decidieron abrir sus negocios sin importar que estos no ofrezcan productos de primera necesidad, algunas papelerías, ferreterías y locales de venta de ropa y calzado, decidieron realizar su jornada de trabajo a pesar de las determinaciones de confinamiento para la población bogotana.

La argumentación de los comerciantes de una de las localidades más grandes y pobladas de la ciudad es que se ven obligados a desacatar las normas oficiales porque simplemente no reciben ingresos y su situación económica es caótica, no cuentan para pagar arriendos e incluso tienen dificultades para su alimentación.

Según las autoridades locales más de 100 establecimientos comerciales han abierto sus puertas y dispuesto la atención para el público, porque cada confinamiento y medida de restricción a la movilidad los pone contra las cuerdas y están desesperados con la situación.

Los famosos trapos rojos, esos que desde el inicio de la pandemia ponen al frente de sus casas aquellas personas que no cuentan con recursos para su alimentación, han sido exhibidos por los comerciantes como señal y símbolo de su difícil situación, ellos indican que no reciben ninguna atención por parte del Gobierno Nacional y que los impuestos, los servicios públicos, créditos bancarios y arriendos no dan espera, mientras las ventas cada vez son menores y no alcanzan para la alimentación y necesidades básicas de las familias.

Funcionarios de las alcaldías locales y distritales se han hecho presentes en la zona tratando de persuadir a los comerciantes para que cierren sus negocios, pero estos se niegan debido a su situación, además de afirmar que no atentan contra las medidas de bioseguridad contra la COVID-19.