Por: Juliana Palomino • Colombia.com

Iniciativa de concejal de Bogotá buscaría que personas sin vacunación no ingresen a Transmilenio

Con esta iniciativa, Ramírez buscaría incentivar la vacunación en la capital del país.

Por ahora no se ha generado ningún debate formal al respecto. Foto: Flickr.
Por ahora no se ha generado ningún debate formal al respecto. Foto: Flickr.

Con esta iniciativa, Ramírez buscaría incentivar la vacunación en la capital del país.

El concejal uribista de Bogotá, Oscar Ramírez Vahos, propuso el pasado martes 24 de agosto que se cierren las puertas de Transmilenio para todas aquellas personas que no se hayan vacunado, además, planteó que esta restricción se extienda también para cines, restaurantes y eventos públicos.

Para el concejal, vacunarse es un acto de responsabilidad social que podría ayudar a la ciudad y en sí al país a lograr la inmunidad de rebaño, sobre todo en el momento tan crítico en el que nos encontramos y de incertidumbre debido a la variante delta que, según han confirmado estudios, es el doble de contagiosa frente a otras variantes de COVID-19.

En este momento se registran 2,5 millones de validaciones en los tres componentes manejados por el sistema de transporte público que corresponden al zonal, troncal y cable, pero, antes de la pandemia eran más de 4 millones de validaciones.

La medida propuesta por Ramírez se ha implementado en varios países de Europa como lo son Francia, Italia y Países Bajos que denominaron a la medida “pases COVID”, en donde se puede comprobar que el pasajero se encuentra al menos con una dosis o con el esquema de vacunación completo. Este es requerido en el transporte público y en eventos masivos también.

Pese a que el concejal resalta que es un acto de responsabilidad social, hay quienes rechazan la iniciativa, pues según replican, esta decisión violaría las libertades civiles y que son discriminatorias. Sin embargo, hay quienes refutan que el interés general debe primar antes que el particular, ya que hay que generar espacios de confianza donde todo mundo se pueda desarrollar con tranquilidad sin pensar en afectar su salud o la de sus seres queridos.

De acuerdo con la reglamentación sobre la vacunación contra la COVID-19, se estipuló que esta debe ser universal y gratuita, pero no se acordó que deba ser obligatoria.