Las sentidas palabras de la madre de Paula Durán: “Ángeles como tú, hija, necesitaba Dios en el cielo”

Paula Durán, la colombiana que fue diagnosticada con cáncer en el estómago y en el cerebro tipo 4, falleció en la noche de este martes 24 de enero en Estados Unidos. La historia que conmovió a toda Colombia tuvo un final triste para quienes se habían aferrado a la fe de que la mujer de 26 años pudiera superar la difícil enfermedad.  

En medio del dolor y la profunda tristeza que ha generado la noticia, su madre, Iris Camargo, quien llegó a California luego de que se le otorgara una visa humanitaria y quien acompañó a Duran en sus últimos suspiros, decidió dedicarle unas sentidas palabras que han conmovido a todos aquellos que ha seguido la historia.

“Ángeles como tú, hija, necesitaba Dios en el cielo. Tu presencia es más que luz y amor. Mi guerrera, te admiro y lo haré siempre. Dios, te entrego mi monita, Paula la luz de mis ojos y la mujer que admiramos con su fuerza y fortaleza, que tuvo hasta su último suspiro; la madre, hija esposa, nieta, hermana, tía, sobrina, amiga y ejemplo de mujer que nunca dijo ‘estoy derrotada’; por el contrario, siempre dijo ESTOY FUERTE”, dice la madre en la primera parte de su texto.

A renglón seguido, la madre de Paula escribió: “Te acompaña mi señor Jesús. La mujer más valiente, hermosa y luchadora es nuestra Paula. Sé que tú eres maravilloso, Dios, y no podría estar en un mejor lugar; gracias, Padre por abrazarla y revivirla con todo tu amor. Te extraño y extrañaré, hija, de eso no hay duda, pero también segura que no estás sola, estás contemplando el rostro y amor de nuestro Dios Perfecto y maravilloso”.

“Volaste nos dejas el amor profundo un rostro angelical y hermoso que nunca olvidaremos y una enseñanza de paz y amor ejemplo a seguir. Nos encamina en los pasos de Dios y todo el amor por ti señor Jesús. ¡TE AMO HASTA EL INFINITO! Mi monita hermosa”, concluyó la mujer en su conmovedora publicación. 

Cibernautas han aprovechado la publicación de la madre de Paula para acompañarla en su dolor, manifestando que su hija los estaba esperando para poder decir “adiós”, pues cabe recordar que ellos -los padres de Paula-, llegaron al país solo un par de días atrás de que ella falleciera. 

La colombiana dejó a tres pequeños hijos que ahora quedaran bajo el cuidado de su esposo, Sergio Vega, un hombre que buscó incansablemente que ella pudiera estar con sus padres en medio de la dolorosa enfermedad, deseo que pudo cumplir antes de partir.