Por: Juan Carlos García Sierra • Colombia.com

Pareja ingresa a un bus de Transmilenio con un carro de mercado lleno de víveres

La frescura de la pareja llegó al punto de ocupar la zona para personas en condición de discapacidad en el articulado sin el menor sonrojo.

En los buses de Transmilenio se transporta de todo sin ningún sonrojo. Foto: Twitter @manolitosalazar
En los buses de Transmilenio se transporta de todo sin ningún sonrojo. Foto: Twitter @manolitosalazar

La frescura de la pareja llegó al punto de ocupar la zona para personas en condición de discapacidad en el articulado sin el menor sonrojo.

Transportarse en un articulado de Transmilenio puede llegar a ser una una tortura y allí se pueden conocer personas que simplemente son ‘el colmo’ de la frescura porque no tienen reparos para violar las normas y el sentido común, así como ningún respeto para sus conciudadanos.

El sistema de transporte masivo de la ciudad de Bogotá, a falta de un metro que ya ni fecha tiene para hacerse realidad, se convirtió en un medio para transportar carga, porque muchos dicen que a los pasajeros se les trata como animales, por eso muchas personas ingresan al sistema con todo tipo de artículos que obstaculizan y molestan a los demás pasajeros.

Bicicletas, maletas, estanterías, lavadoras, estufas, llantas de camión, trasteos y hasta motocicletas transportan descuidados usuarios del sistema que no tienen ningún reparo para hacer del viaje en los articulados una pesadilla, y en las redes sociales se denunció en la cuenta de Twitter del periodista Manuel Salazar el caso en el que una pareja ingresó a un articulado con un carrito de mercado lleno de víveres y lo ubicó en la sección especial para las personas con sillas de ruedas.

Mientras los pasajeros de la ruta J24 esperaban llegar pronto a su destino, una pareja muy fresca subió un carro de mercado lleno de víveres ocupando un enorme espacio y sin ninguna consideración para los demás pasajeros, los que, entre indignados por tamaña violación a las normas ciudadanas, e indiferentes, porque de tantas cosas que se ven ya nada causa extrañeza, no tenían más remedio que ‘aguantar’ y esperar la estación para descender del bus.

En las redes sociales se divulgó la situación y se criticó la acción de los indolentes ciudadanos que luego de mercar ingresaron con todo y carrito al sistema porque incomodó a los sufrientes usuarios de Transmilenio que tiene que soportar ‘de todo’.

Mientras unos criticaban la ausencia de una autoridad que no les permitiera ingresar a una estación y a un bus articulado, otros internautas afirmaban que el mercado está tan caro que ya ni para el taxi alcanza y por eso no hubo más opción que viajar en el atiborrado ‘transmi’.

Una infracción de $883.323

Transportar una sobrecarga en el sistema de transporte bogotano conlleva una multa de 883.323 pesos, pero a muchos esto parece no importarles, mientras que los ciudadanos que no tienen más opción que transportarse en este sistema tienen que soportar robos, golpes, asesinatos, violaciones e intolerancia y ´frescura´ de toda clase.

Hace unos días se dio a conocer el caso de un hombre que ingresó con una moto a una estación y esperaba con ella abordar un articulado, pero elementos de la Policía lo impidieron e impusieron dos comparendos. El motociclista afirmó que tuvo que abordar una estación con su moto porque esta sufrió desperfectos mecánicos.