Petro cuestiona cierre del espacio aéreo venezolano ordenado por Estados Unidos

El presidente Gustavo Petro volvió a marcar distancia frente a las recientes acciones de Estados Unidos hacia Venezuela, al pronunciarse sobre el cierre total del espacio aéreo venezolano dispuesto por el gobierno de Donald Trump. El jefe de Estado publicó un mensaje en X en el que interrogó la legitimidad internacional de esta determinación y dejó en evidencia su desacuerdo con la medida, tomada mientras se intensifican las fricciones entre Washington y Caracas.

Petro abrió su mensaje con una pregunta dirigida a la comunidad internacional, cuestionando qué facultad jurídica tendría un mandatario extranjero para imponer restricciones tan severas sobre el territorio aéreo de otro Estado. En esa línea, señaló que una decisión de ese tipo presenta implicaciones serias sobre los principios básicos del derecho internacional y la soberanía nacional, pilares que, según enfatizó, son esenciales para el orden global.

El mandatario también mencionó a la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI), el organismo técnico encargado de velar por la seguridad y la coordinación de la aviación civil mundial. Petro sugirió que, de existir una norma que avalara la determinación anunciada por Estados Unidos, sería necesario explicarla; pero si no existiera, consideró que la OACI estaría incumpliendo su rol en un momento clave.

Así mismo, el presidente colombiano sostuvo que las medidas tomadas por Washington contra Caracas vienen escalando desde hace meses y expresó su incomodidad por lo que calificó como una injerencia que pone en riesgo los fundamentos del sistema internacional. Recordó que sus declaraciones las hacía también en su calidad de presidente pro tempore de la CELAC, además de mandatario colombiano.

El régimen denuncia la medida y la tilda de “amenaza colonialista”

El pronunciamiento de Petro ocurrió en paralelo al rechazo expresado oficialmente por el gobierno venezolano, que calificó el anuncio de Trump como una “amenaza colonialista”. A través de un comunicado, Caracas afirmó que “denuncia y condena la amenaza colonialista que pretende afectar la soberanía de su espacio aéreo”, a la que describió como "una nueva agresión extravagante, ilegal e injustificada contra el pueblo de Venezuela".

Mientras la administración estadounidense sostiene que su despliegue militar en el Caribe busca frenar las rutas del narcotráfico que se dirigen hacia su territorio, autoridades venezolanas sostienen que detrás de estas decisiones existe la intención de aumentar la presión política con miras a forzar un cambio de gobierno en el país.