Violencia contra menores no cesa: Mosquera se sacude por salvaje ataque

La violencia contra los menores en Colombia no cesa y la población entera se pregunta qué es lo que pasa y por qué esta situación no tiene freno, sino que, por el contrario, aumenta cada día.

Mosquera sacudida con terrible hecho

En la madrugada del domingo la población de Mosquera fue sacudida con la triste noticia del fallecimiento de una niña de apenas 9 años en el interior de una casa de un conjunto habitacional del municipio cercano a Bogotá, lo que más conmoción genera es que fue atacada de manera salvaje por su padrastro.

Cuando los policías que recibieron una llamada en un aparente caso de violencia intrafamiliar llegaron al lugar de los hechos encontraron una escena dantesca al ver a una niña de 9 años víctima de un ataque con arma cortopunzante en diferentes partes de su cuerpo.

Ambiente perturbador

El ambiente que encontraron los uniformados de la Policía daba cuenta de una escena de violencia extrema con vidrios rotos y sangre como testigo en puerta, piso y paredes, pero lo más grave de todo era que una pequeña se encontraba muy mal herida.

La presencia de la Policía hizo que un hombre, al parecer el autor del ataque contra la menor, se propinara heridas para acabar con su vida, sin embargo, la intervención policial evitó que se quitara la vida y fue llevado, junto con la niña, a un centro asistencial.

La pequeña no sobrevivió al ataque, mientras que el hombre, presunto agresor y padrastro de la menor, en mal estado fue recluido en una UCI y su pronóstico es reservado, por tanto, no se puede garantizar si sobrevivirá.

A punto de ser linchado

Si agredir a un niño es algo sumamente grave, propinarle 40 heridas es un acto de sevicia, casi inhumano, y, de acuerdo con el secretario de seguridad de Mosquera, Diego Piza, esto fue producto de un arranque de venganza de un hombre de 30 años en contra de su pareja sentimental en medio de una discusión.

La comunidad que interrumpió su siesta en la madrugada del domingo, intentó linchar al presunto agresor, quien optó por autolesionarse, y por ello no tiene garantizada su recuperación, pues lucha en una Unidad de Cuidados Intensivos por su vida debido a las lesiones que se causó.

La comunidad de vecinos y de diferentes barrios del municipio cundinamarqués de Mosquera convirtieron la fachada de la casa en donde fue atacada la menor en un santuario de oración compuesto de cirios y en donde se elevan plegarias por su alma y piden protección divina para todos los menores que en Colombia se han convertido en blanco de los violentos.