Presidente Petro propone que empresas del mundo compensen emisión de gases de invernadero

El presidente de la República de Colombia, Gustavo Petro Urrego, fue recibido con aplausos y vivas por un buen número de colombianos residentes en New York con motivo de su visita a la capital del mundo para participar de la asamblea de la Organización de las Naciones Unidas.

Pocas veces se había visto que un mandatario nacional hubiese sido recibido con tanto ánimo, así como pocas veces se vio que un presidente colombiano liderara acciones encaminadas al bienestar mundial.

Uno de los aspectos que más ha promocionado Gustavo Petro desde que era candidato a la Presidencia de la República es el de la ecología, una vertiente que involucra otros como la economía, por eso insiste con la transición energética para dejar de depender de los combustibles fósiles y recurrir a las energías limpias.

Una de las preocupaciones del mandatario colombiano es el estado de la selva Amazónica, el pulmón del mundo cuyo deterioro es denunciado, especialmente desde el inicio de la pandemia, pero poco y nada se hace para su protección e intervención.

Gustavo Petro planteó ante unos periodistas que cubren la 77 Asamblea General de la ONU, un fondo mundial de 1.000 millones de dólares durante 20 años para proteger y salvar la selva Amazónica, cuyo deterioro, llevaría a la humanidad a su ‘fase final de extinción’.

Gustavo Petro sostuvo en New York un encuentro con John Kerry, enviado especial presidencial de los Estados Unidos para el clima y quien fuera exsenador y exsecretario de Estado de su país.

“Tuvimos un encuentro en un esfuerzo para articular la paz de Colombia y la solución a la crisis climática, que tienen un común denominador: la selva Amazónica, las selvas. La paz de Colombia está ligada a un cambio de política antidrogas incluso en los Estados Unidos, que esperamos genere una sinergia entre EE.UU. y Colombia”, dijo Gustavo Petro a los medios.

El presidente colombiano afirmó además que mediante un esfuerzo mundial se podría proteger la selva amazónica, y, de paso, contribuir con la financiación de la paz en Colombia, a un costo de 1.000 millones de dólares por año durante 20 años.

“El esfuerzo de un gran fondo multilateral, mundial, para salvar la selva, y con el que podemos financiar la paz de Colombia. Tendría que ser del orden de la selva Amazónica porción colombiana, del Chocó, del Catatumbo del orden de los 1.000 millones de dólares anuales durante un lapso de 20 años”, apuntó Gustavo Petro.

Petro considera que este esfuerzo no debería tener dificultades porque cree que las empresas del mundo tienen que compensar sus emisiones de gases de efecto invernadero con gastos en las esponjas que subsumen esos gases.