La reacción de Iván Duque cuando le dijeron que tenían que llevar la espada de Bolívar a Petro

Gran controversia causó que el último día del gobierno de Iván Duque continuaran las hostilidades con el que, hasta ese día, fue el líder de la oposición y hoy es el presidente de la República. Todo se trató de la espada del libertador Simón Bolívar. 

Gustavo Petro le había pedido prestada a su antecesor el emblema para la posesión presidencial, pero Duque impidió que este saliera por, supuestamente, no contar con las pólizas al día. En las últimas horas se conoció un vídeo en el que se ve la reacción del expresidente ante la orden del nuevo gobierno de sacar la espada de la Casa de Nariño. 

El metraje, que fue publicado por Noticias Caracol y después se viralizó en las redes sociales, muestra cuando un funcionario le pide permiso a Duque para sacar la espada a la Plaza de Bolívar.

El exmandatario le preguntó si toda la documentación está en orden, a lo que él respondió que sí, por lo cual, finalmente, tuvo que ceder y permitió la retirada de la espada. Iván Duque le dijo al hombre: “Cumpla usted con el deber y proceda usted una vez se cumplan todos los requisitos de ley”. El custodio le respondió: “Como orden, señor presidente. Así será”. 

¿Por qué Duque no le prestó la espada a Petro?

Desde la Casa de Nariño sustentaron la negativa a prestar la emblemática arma libertadora al nuevo presidente por motivos de seguridad pues, según afirmaron fuentes oficiales, le haría falta unas pólizas que la protegen en diferentes casos. 

Sin embargo, la comitiva y grupo de trabajo de Petro había señalado que contaba con todas las medidas de seguridad para garantizar el bienestar de este objeto durante la ceremonia de mando presidencial.

Antes de que el Jefe de Estado se posesionara, su equipo tenía lista la logística para que la espada saliera de la Casa de Nariño hasta el Palacio de San Carlos, donde entraría en custodia de la seguridad de la Cancillería de Colombia.

Luego, el arma se trasladaría hasta la Plaza de Bolívar, donde quedaría en manos de la Alcaldía Mayor de Bogotá y la Presidencia de la República. La espada siempre estaría bajo el cuidado de expertos en conservación y restauración del Ministerio de Cultura.

La revista Semana desestimó los argumentos de la Casa de Nariño e indicó que el arma si tendría una póliza de todo riesgo por un valor de $1.000 millones, que estaría vigente desde las 00:00 del 7 de agosto, por 24 horas.

La póliza contemplaba daño material por terrorismo, incendio, rayo, explosión, daños por agua y anegación. Además de todo tipo de fenómeno natural, como huracanes, terremotos y desastres por volcanes.