Por: Paula Castro • Colombia.com

El extraño caso de un hombre que fue al médico y le encontraron la nariz llena de insectos

El hombre descubrió que sus sangrados contantes de sangre tenían una razón y es que estaba lleno de insectos que casi le llegaban al cerebro.  

Hombre que fue al médico y le encontraron la nariz llena de insectos vivos. Foto: Shutterstock
Hombre que fue al médico y le encontraron la nariz llena de insectos vivos. Foto: Shutterstock

El hombre descubrió que sus sangrados contantes de sangre tenían una razón y es que estaba lleno de insectos que casi le llegaban al cerebro.  

Un hombre en Estados Unidos se ha convertido en uno de los casos más extraños de la medicina, pero además en un milagro de vida luego de enterarse de que estaba viviendo con alrededor de 150 insectos dentro de sus fosas nasales. Hasta ahora no se conoce la identidad del hombre, pero se sabe que acudió al médico porque tenía fuertes dolores y sangrados que comenzaron varios meses antes de ir al médico. 

En declaraciones al medio First Coast News, el otorrinolaringólogo David Carlson, quien atendió al paciente en el HCA Florida Memorial Hospital, señaló que el caso del hombre fue un milagro, pues le encontraron los más de 100 insectos muy cerca del cerebro y "podrían haberlo matado".

El hombre había tenido un tumor cancerígeno en la nariz tiempo atrás y de alguna manera normalizo sus síntomas hasta que empeoraron al punto que tuvo que ir al hospital: "Después de un par de horas, mi cara comenzó a hincharse, mis labios se hincharon, apenas podía hablar. También sentía que toda mi cara estaba en llamas", explicó al medio ya mencionado. 

Tras llegar al hospital, el doctor David Carlson comenzó a examinarlo y notó un extraño movimiento en su nariz, por lo que decidió ingresar una pequeña cámara por la nariz del hombre y fue cuando descubrió que había docenas de insectos que se alimentaban del tejido que estaba en el interior de su nariz y que el excremento de los animales obstruyeron sus cavidades nasales y ocasionaron una fuerte inflamación.

"En cuanto al tamaño, hay variaciones, pero los más grandes eran tan grandes como la punta de mi meñique. Había ciertas larvas dentro de la nariz que corrían buscando lugares para alimentarse y otras que se habían enterrado en el tejido", explicó el Dr. Carlson.

Aunque intentaron succionarlos por estar justo debajo del cerebro, la extracción fue complicada y decidieron quitarlo uno por uno y sobre la causa se cree que pudo infectarse debido a que manipulaba peces muertos y enjuagaba sus manos en el río tras pescar, además de tener el sistema inmunitario débil debido al cáncer que padeció varios años atrás. 

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