Vuelta a España: Primoz Roglic se impuso sobre Remco Evenepoel en etapa de montaña

La octava etapa de la Vuelta a España inició en Dénia y finalizó en Xorret de Catí en la Comunidad de Valencia en una jornada de montaña con un grupo de corredores favoritos dispuestos a despojar del liderato al francés Lenny Martínez, un francés con sangre española y descendiente de una dinastía de corredores.

Los escaladores de la ronda saltaron también con la idea de sumar puntos para arrebatarle o restarle distancia en la camiseta de la montaña a Eduardo Sepúlveda, la sorpresa argentina que muestra la cara por esta cara del continente que no ha logrado colarse en los puestos de vanguardia y con un Juan Sebastián Molano que no logró hacerse primero en los embalajes.

La fracción inició con la caída a pocos kilómetros de la partida con la caída de uno de los favoritos, el portugués Joao Almeida, pero a pesar de sus heridas logró recuperarse y volver al pelotón, sin embargo, solo con el paso de las horas el cuerpo comienza a sentir los efectos de los golpes que determinan si se puede batallar.

La etapa 8 inició con un grupo de 30 corredores escapados buscando los puertos de montaña y el español de Mota del Cuervo de 33 años, Jesús Herrada, coronó dos puertos de montaña subiendo sin las dificultades de aquel que tiene su mismo nombre y que murió en la cruz por nosotros.

El liderato de Lenny Martínez estaba en riesgo con Cristián Rodríguez de 28 años y nacido en El Ejido en España, quien se había mostrado en etapas anteriores y cuyo equipo trabajaba para ponerlo a portar la camisa roja que distingue al líder de la ronda española que en el camino valenciano no mostraba a ningún corredor colombiano tratando de dar pelea.

Eduardo Sepúlveda batallaba para que no los escaladores siguieran sumando puntos en los puertos de montaña, pero al final de la jornada no lograron arrebatarle la camisa de montaña, demostrando ser un corredor valiente y que sigue sorprendiendo con su actuación.

El equipo de Lenny Martínez, el líder del Groupama de apenas 20 años, trabajó para su corredor y logró conjurar el peligro que se cernía sobre su liderato a falta de 30 kilómetros para el final de carrera.

Las diferentes clasificaciones mantenían a sus líderes en sus respectivos puestos y la fuga de varios kilómetros de 4 corredores de los 30 iniciales parecía llegar a su final para esperar en los últimos kilómetros quienes podrían lanzarse en pro de la victoria.

En el último ascenso la fuga terminó y favoritos como Primoz Roglic y Remco Evenepoel marcaban el paso hacia la meta, a 5 kilómetros atacó el estadounidense Sepp Kuss y la persecución la protagonizaban Joao Almeida y el español Juan Ayuso, en aquel momento el estadounidense se ponía líder de la clasificación general.

Evenepoel, Roglic, Vingegaard, Mas, Soler y Ayuso cazaron a Kuss mientras Lenny Martínez batallaba por defender su liderato en el descenso a 3 kilómetros de meta. 

Primoz Roglic se impuso en la línea de meta a Remco Evenepoel en una etapa que definió todo en el último ascenso y el líder Martínez cayó al tercer lugar cediendo el liderato a Sepp Kuss y poniéndose segundo Marc Soler.