Roberto Firmino le dijo 'adiós' a Anfield, salvando a Liverpool de una derrota

Liverpool saltó al terreno de juego este sábado, para chocar frente al Aston Villa, por la fecha 37 de la Premier League, con el objetivo principal de llevarse una victoria, que le permitiera seguir buscando la clasificación a la Liga de Campeones de la próxima temporada, el premio consuelo de un Liverpool con una temporada pasada por lo irregular y donde los grandes partidos que los llevaron a medirse contra el Real Madrid hace tiempo, brillaron por su ausencia.

Así pues, con Luis Díaz como inicialista, en su posición habitual y acompañado en ataque por Cody Gapko como centro delantero y Mohammed Salah como extremo por derecha, el cuadro rojo de Merseyside saltó a la grama de Anfield, para seguir ampliando su racha de victorias, contra un durísimo Aston Villa, que actualmente también pelea por clasificar a competencias europeas y en cuyo banco descansaba otro colombiano: El delantero llegdo hace poco dela MLS, John Jader Durán.

Los visitantes sacudieron primero el estadio, a través de un lanzamiento de penal de Ollie Watkins que se fue ancho y no subió al marcador. Los dirigidos por Unai Emery siguieron buscando y fueron premiados rápidamente, a través de Jacob Ramsey, que marcó el 1 a 0 al minuto 27 y tras la asistencia del brasilero Douglas Luiz.

Liverpool parecía no responder y ese solitario gol fue más que suficiente para cerrar la primera mitad. El segundo capítulo en Anfield comenzó con un local completamente volcado sobre la portería de Emiliano Martínez, que con el paso del tiempo se convertía en una de las figuras del partido.

Al minuto 55, parecía llegar la redención para Luis Díaz, de flojo partido: Recibió un balón largo que bajó para Virgil Van Dijk, quien puso el balón para que Cody Gakpo mandara el balón al fondo, para el presunto empate del equipo local. Sin embargo, el VAR llamó y avisó un posible fuera de lugar del defensor central, justo en el pase del colobiano.

Tras la celebración perdida, el cuadro dirigido por Jürgen Klopp no tuvo más que seguir volcado al ataque, buscando desesperadamente el empate. Al minuto 72 se le acabó el partido al guajiro, que más allá de acumular minutos y seguirse adaptando tras la lesión, no pudo hacer nada más. En su lugar entró Roberto Firmino, uno de los emblemas del pasado reciente del rojo, ahora nada más que un recuerdo.

El brasilero, que estaba en su partido de despedida, sabía que era su momento y aprovechó la oportunidad: Mohammed Salah puso el pase y Firmino el gol. Anfield se puso de pie para celebrar la anotación del jugador, que bastó para rescatar un punto en un durísimo partido. Fue la despedida del nacido hace 31 años en Maceió. Al final, la historia terminó con un abrazo eterno entre Alisson y Firmino. Era el final de una era.