Javier Hernández Bonnet hace delicada denuncia en contra de jugadores del Junior y del Medellín

Una sombra que sigue causando terror en Colombia, aun cuando el mes de octubre ya terminó, es la de las apuestas ilegales, debido a que vuelve a posarse sobre el fútbol nacional y esta vez con una denuncia que sacude la credibilidad de la Liga BetPlay. 

Lo anterior debido a que, en un entorno ya marcado por sospechas y escándalos recientes, el periodista Javier Hernández Bonnet, del medio Caracol, hizo una acusación impactante sobre la final del campeonato anterior entre Junior de Barranquilla y Deportivo Independiente Medellín.

Hernández, durante su intervención en Blu Radio, y en declaraciones recogidas por el portal futbolred, reveló un hecho que ha generado inquietud en el ambiente futbolístico. “Lo que voy a decir me puede meter en problemas, pero lo diré: en la final del campeonato pasado entre Junior y Medellín, aunque no se formularon cargos oficiales, hubo jugadores a los que no se les renovaron los contratos debido a desconfianza. Nadie cree en nadie”, afirmó el periodista.

Esta acusación subraya un problema que las autoridades y el máximo ente del fútbol en Colombia parecen no haber resuelto del todo: el amaño de resultados y la influencia de apuestas ilegales en el fútbol profesional. Hernández enfatizó la falta de medidas efectivas para abordar y solucionar estos incidentes, que afectan la transparencia del deporte.

Por ende, el caso de la final entre Junior y DIM, disputada hace exactamente 11 meses, no es un hecho aislado, debido a que recientemente, otros clubes de la Liga BetPlay, como Boyacá Chicó y Envigado han señalado posibles implicaciones de sus jugadores en actividades relacionadas con apuestas. 

En consecuencia las instituciones han informado que está llevando a cabo investigaciones internas y que, tras evaluar las pruebas disponibles, tomarán las acciones disciplinarias correspondientes, asegurando un debido proceso para los involucrados.

A esta lista de denuncias se suman equipos como Patriotas, Unión Magdalena, Fortaleza y Envigado, que también han reportado situaciones similares en el pasado. Estos incidentes, aunque no siempre se traducen en sanciones concretas, han sembrado dudas sobre la transparencia de algunos encuentros en el fútbol colombiano.

Así las cosas, esta situación resalta la necesidad urgente de implementar controles más rigurosos y mecanismos de supervisión eficientes para garantizar que los partidos se disputen de forma justa. Las apuestas ilegales no solo socavan la integridad del deporte, sino que también afectan la confianza de los aficionados y la reputación de los jugadores y equipos.