La selección Colombia hace historia

Nunca antes, en sus cuatro experiencias previas en un campeonato del Mundo, el combinado cafetero había transitado con tanta autoridad por la competición. De hecho, jamás Colombia había concluido la fase de grupos con dos victorias. Y menos de manera consecutiva.

José Pekerman ha logrado alimentar la autoestima de este grupo plagado de talento y capaz de competir a alto nivel. Pretende ser el 'tapado' del torneo y avanzar más que nunca en el mayor escaparate del fútbol mundial a nivel de selección.

El tope colombiano en este torneo está en los octavos de final. Nunca ha logrado superar esa barrera que alcanzó por única vez en Italia 90, a donde llegó como una de las mejores terceras en la fase de grupo. Entonces, Colombia superó a los Emiratos Árabes en el primer partido, perdió contra Yugoslavia en el segundo (1-0) y logró un punto ante Alemania en el tercero (1-1). Camerún evitó su pase a cuartos tras vencer por 2-1.

Fue lo máximo que consiguió la selección colombiana con una de las mejores generaciones de su historia, que decayó en ediciones posteriores, en Estados Unidos 1994 y en Francia 1998, donde no sobrepasó la fase de grupos. El torneo galo de hace dieciséis años, supuso el final mundialista del equipo sudamericano. La odisea por el desierto que se ha prolongado durante más de tres lustros.

Colombia se ha puesto de moda y también su fútbol. Como entonces. La mayoría de sus jugadores están asentados en las competiciones del fútbol europeo, las de enjundia. Las que proyectan definitivamente al jugador.

Nombres como Juan Cuadrado, James Rodríguez, Jackson Martínez o Juan Fernando Quintero llevan tiempo en la agenda de los grandes clubes del Viejo Continente, que asumen el disparo de su valor en el torneo mundialista.

Pekerman ha sabido salir airoso de cada contratiempo con naturalidad. Ha pasado por alto cada mazazo, especialmente provocado por las lesiones, y cultivar la madurez de un plantel que empieza a asimilar su potencial aún con la ausencia de nombres ilustres como Luis Amaranto Perea, Edwin Valencia, Luis Fernando Muriel y, sobre todo Radamel Falcao. A ellos, además, se sumó la de Aldo Leao Ramírez, que cayó del plantel ya en Brasil.

Colombia ya puede mirar más allá en el Mundial 2014. Pendiente de fijar solo su posición en octavos, al equipo de Pekerman le espera un rival del Grupo C: Italia, Costa Rica, Uruguay o Inglaterra. Aunque el conjunto cafetero, invadido por la fe, puede con todo. EFE