Faltan cinco pa' las doce: Historia tras la canción más escuchada en Colombia los 31 de diciembre

La cultura colombiana tiene una extensa lista de tradiciones en épocas decembrinas que han trascendido de generación en generación, y no importa que tan evolucionadas sean las familias, como mínimo es adoptada una en cada hogar.

Se acerca el fin de año y con él, una serie de rituales, costumbres o agüeros realizados con el objetivo de atraer las mejores energías para iniciar el 2022 con el pie derecho, ya sea con el consumo de uvas a la media noche, o dándole una vuelta a la manzana con maleta en mano.

La música juega uno de los roles más importantes dentro de estas celebraciones, y específicamente los 31 de diciembre, desde hace más de medio siglo, no puede dejar de sonar en las casas el icónico éxito musical 'Faltan cinco pa' las doce'.

Las sensación en común al escuchar ese sencillo es de nostalgia, ya que mientras algunas personas  tienden a recordar a aquellos seres queridos que por diferentes razones se despidieron de este mundo, otros se desahogan avivando las peores, o mejores experiencias, que dejó el año reciente.

Lo cierto es que la canción tiene toda una historia tras su éxito. Oswaldo Oropeza, que dedicó varias letras a los festejos de diciembre, incluyendo 'Mamá donde están los juguetes', también fue el artista tras la escritura de este tema.

Oropeza era uno reconocido compositor venezolano que en 1963, alistaba el álbum titulado 'El gallo pélón', que iba a ser interpretado por Nestor Jesús Zavarce, quien se dio a conocer en un principio como actor de cine.

Oswaldo fue quien descubrió su talento musical y lo convirtió en uno de los cantantes más escuchados de la época en el continente gracias a la canción 'El pájaro Chogüí'; de hecho, esa fama lo llevó a tener su propio programa de televisión.

En este entonces ya era bastante reconocido, pero su imagen se expandió el doble cuando Oswaldo le entregó 'Faltan cinco pa' las doce' para que la interpretara con su voz, convirtiéndo la canción en un puente que le permitió recorrer varios países.

En una entrevista que concedió Zavarce a RCN en el 2009, un año antes de su fallecimiento, además de expresar su eterno agradecimiento a Oswaldo por haberlo elegido para darle voz a la canción, contó que el éxito del tema se debía a que "consolidaba los valores de la navidad, la fe en las campanas de la iglesia sonando, la solidaridad de los brazos sin cesar y el amor de la pobre viejecita que lo espera".