Novena de aguinaldos, la tradición navideña más colombiana fue escrita por un ecuatoriano

Muchas personas de varias nacionalidades coinciden en que la navidad en Colombia es una temporada única que quisiera ser vivida todo el año, por eso desde septiembre se comienzan a asomar los ángeles y papá Noel (porque en Colombia no hay Santa Claus ni San Nicolás), y en noviembre ya todo luce, huele y sabe al mes más esperado de todos.

La novena de aguinaldos es una composición un poco extraña, pues muchos colombianos aún nos preguntamos sobre lo qué significan algunas de sus frases, como “prosternado en tierra” o “do su niño vean en tiempo cercano”, y debería ser un texto obligatorio en la escuela, pues quien logra pronunciar sin trabas sus estrofas o versos, puede leer lo que sea.

En Colombia no hay navidad sin novena de aguinaldos y si se está fuera de la patria, hasta en sesión virtual se puede rezar, ya la pandemia nos puso la virtualidad como algo tan normal que no hay excusa para no estar cerca de los más lejanos.

Los buñuelos, la natilla y el tutaina no faltan, pero lo que seguramente muchos no sabían es que la novena de aguinaldos, la más tradicional forma de celebrar la navidad en Colombia, no fue creada por un colombiano, no señor, fue idea de un ecuatoriano.

Fray Fernando de Jesús Larrea, un sacerdote franciscano nacido en Quito es el autor de la novena de aguinaldos tal como la conocemos, de manera que él es el culpable de que digamos “raíz sagrada de José”, cuando realmente es de Jesé, y que “oh, Adonaí potente” no tenga nada que ver con la canción que nunca falta en diciembre y dice “Adonay, ¿por qué te casaste Adonay?”.

El padre Larrea vivió muchos años en Colombia, especialmente en el occidente del país, y gran parte de su vida y de sus esfuerzos los entregó en ver consolidada una gran obra: el Colegio de Misiones de San Joaquín en la ciudad de Cali.

Se dice que una monja colombiana fue la encargada de ampliar la composición de Fray Fernando, y fue en Bogotá donde se publicó por primera vez la novena de aguinaldos en 1784, pedida de manera formal por el Colegio de la Enseñanza de la capital del Nuevo Reino de Granada al sacerdote, por eso su lenguaje es tan particular, pues al parecer contiene un lenguaje de la época, propio del Ecuador, el occidente colombiano y hasta de la Santa Fe colonial.

Los gozos, la parte más famosa de la novena se conserva de acuerdo con la creación original, pero las jornadas fueron tomadas de la monja María de Jesús de Ágreda, porque el padre quiteño solo escribió las primeras dos.

Sea como sea, la novena de aguinaldos es tradición navideña colombiana y solo se reza y canta en Colombia, o en donde haya un colombiano.