Poderosas oraciones a Santa Cecilia los músicos y para encontrar el amor

Santa Cecilia es una de las figuras religiosas más veneradas de la Iglesia Católica. Nacida en Roma alrededor del siglo II o III d.C., es conocida como la patrona de la música y los músicos.

La tradición cristiana señala que Santa Lucía provenía de una familia noble romana. En su juventud se casó con un hombre llamado Valeriano; no obstante, hizo un voto de virginidad y convenció a su esposo para que respetara su compromiso de consagración a Dios.

Esta mujer religiosa no tuvo una vida fácil, fue arrestada durante una persecución contra los cristianos en Roman junto a su esposo y su hermano, Valeriano y Tiburcio. Ambos fueron ejecutados, y poco después, Cecilia también fue condenada a muerte. 

La fiesta de Santa Cecilia se celebra el 22 de noviembre de cada año, día en que sus devotos se encomiendan a ella para pedir favores como la protección de los músicos y el hallazgo del amor. A continuación te compartimos dos poderosas oraciones de la web Oración.co que puedes rezar en su día. 

Oración a Santa Cecilia por los músicos 

Gloriosa noble romana, te imploro que me bendigas para que sea un buen músico y me des la sabiduría necesaria para tocar correctamente mi instrumento o cantar de la manera adecuada.

Ilumíname para que logre alcanzar la prosperidad y la fortuna en esta bella profesión de la música. Aleja a las personas que siembran el egoísmo y la envidia en mi vida.

Santa Cecilia, hazme un músico humilde y sabio; no permitas que sea víctima de la avaricia o la soberbia, que tanto mal generan.

Oración a Santa Cecilia para encontrar el amor

Querida Santa Cecilia, noble romana y mártir de la Iglesia, regálame tu bendición para que pueda experimentar el sentimiento más bonito que Dios creó.

Siembra buenas sensaciones a mi alrededor y dame la esperanza necesaria para vencer a la oscuridad que no me deja ser feliz.

Muéstrame la manera indicada para conocer a la persona con la que Dios desea que comparta el resto de mi existencia y prometo agradecerte cada día.

Santísima señora de Roma, permite que el amor y la felicidad guíen mi camino. Cúbreme con tu sagrado manto para que los resentimientos nunca tomen posesión de mi corazón. Amén.