¿Cómo transporta la NASA sus cohetes?

La construcción de este tipo de aparatos no tiene lugar en el área de lanzamiento, por lo que se requiere de una maquinaria especial para poder transportarlos a las plataformas de despegue, sin duda cada lanzamiento realizado por la NASA representa varios millones de dólares. Además de requerir una tecnología avanzada y minuciosamente diseñada para cada misión, razón por la cual se convierten en máquinas indispensables en cada proceso, cabe destacar que las estructuras lanzadas al espacio pesan toneladas. 

El transporte especializado en tales procesos se denomina 'transportadores de orugas' un ensamblaje gigantes e imponentes que básicamente cumplen con la función de transportar los cohetes desde el Edificio de ensamblaje de vehículos o Vehicle Assembly Building (VAB) hasta el complejo de lanzamiento 39. Se trata de una distancia de tan solo 6,75 kilómetros, pero que, de otra forma, no sería posible realizar dicho trayecto. 

Entre sus características estructurales, se destaca que está formada por un total de 2 cabinas, por otra parte, su consolidación tuvo un costo de 28 millones de dólares, cifra elevada teniendo en cuenta que el contrato tuvo lugar en 1965. Durante muchos años, estos vehículos terrestres tuvieron el privilegio de ser los más grandes del mundo, título que fue arrebatado por la excavadora alemana Bagger 288.

Su peso, es de 2 .721 toneladas, así mismo está formado por ocho orugas (tractor de tracción utilizado principalmente en vehículos pesados) cada una de ellas tiene 57 eslabones, y cada eslabón pesa 900 kilogramos. Con el objetivo de poder mover el cohete, dispone de 16 motores de tracción. Gracias a ello, se consigue obtener el desplazamiento de todo el equipamiento. Es oportuno aclarar que no todos los motores tienen la misma función. 

En cuanto a la velocidad, por la tarea delicada para la que han sido diseñados, no pueden ejercer altas velocidades es así como la ideal es de 1,6 km/h si dispone de carga en la estructura, mientras que si está vacío consigue alcanzar los 3,2 km/h. Gracias a estas prestaciones, es capaz de completar un desplazamiento completo en unas 5 horas.

En total desde el año de su fabricación se puede decir que han cumplido con recorrido de unos 5.000 kilómetros recorridos, teniendo en cuenta su ardua labor, siendo sin duda una de las invenciones más maravillosas de la humanidad.