Hallan agujero negro que se moviliza libremente por el espacio

El pasado lunes, 07 de febrero, un estudio publicado por en la plataforma científica arXiv dio a conocer un increíble descubrimiento de un grupo de astrónomos, liderado por Kailash Sahu, del Space Telescope Science Institute (STScI), en Estados Unidos; los expertos vieron, por primera vez, un agujero negro de siete masas solares deambulando libremente por el espacio interestelar, gracias a un microlente gravitacional, el cual se trata de la aparición de una fuente de luz muy brillante proveniente de una estrella o un cuásar, que se alinea con un objeto compacto que hace que los rayos se desvíen.

De esta forma, se pudo identificar el movimiento agujero negro que se encuentra a 5.100 años luz de la Tierra y que viaja con una velocidad aproximada de 45 kilómetros por segundo; vale la pena mencionar que este es un hecho tan importante debido a que los agujeros son, por lo general, muy difíciles de detectar, precisamente porque se pierden en el fondo negro del espacio.

¿Qué son los agujeros negros?

Los expertos aseguran que hay entre 10 y 1.000 millones de agujeros negros de masa estelar viajando de forma silenciosa por la galaxia, pero ¿qué son exactamente? Las dificultades para observarlos hacen que sean pocos los datos que se tienen sobre estos extraños cuerpos, sin embargo, investigaciones apuntan a que muchos de ellos se forman por el colapso gravitatorio de algunas estrellas.

Cuando la estrella muere, siendo aplastada por su propia gravedad, termina comprimiéndose hasta quedar reducida a un simple punto de color negro, o un agujero; además, se sabe que en su interior se genera un poderoso campo gravitacional que hace que nada pueda escaparse, ni una partícula material ni la luz, y es cuando atrapan algo como esto que se hace un poco más sencillo detectarlos o saber sobre su existencia.

¿Cómo lo descubrieron?

El estudio inició desde el año 2011, luego de que investigadores estudiaran una estrella que brillaba sin ninguna razón lógica, y pasaron 6 años observando cómo se daban los cambios de luz, analizando los datos recogidos del telescopio espacial Hubble (HST) de la NASA.

De esta forma, pudieron evidenciar que la posición de la estrella parecía cambiar, lo cual solo podría ocurrir por un objeto invisible en movimiento, como un agujero negro; sin embargo, para confirmar dicha teoría siguieron estudiando la estrella, descartando la posibilidad de que la luz proviniera de la lente y descubriendo que tenía una gran duración, lo cual son datos suficientes para determinar que se debe a la existencia de un agujero.