Tormenta solar caníbal: ¿qué podría ocasionar en la Tierra?

Una tormenta solar es un fenómeno que se da cuando el sol emite ráfagas de plasma conductor de electricidad, lo cual se denomina una eyección de masa coronal (CME). Este viento solar puede llegar a ser muy preocupante cuando choca con el campo magnético de la Tierra, pues por lo general pasa a velocidades muy altas de entre 250 kilómetros por segundo (km/s) hasta 3000 kilómetros por segundo (km/s).

De hecho, cuando a una tormenta solar se le denomina ‘caníbal’ es porque alcanza la velocidad máxima, por lo que es mucho más fuerte y puede llegar a ser más perjudicial, causando increíbles daños en las comunicaciones, la electricidad, los dispositivos electrónicos y los satélites.

La última tormenta eléctrica se dio el pasado 03 de noviembre, sin embargo, la más fuerte que se ha registrado hasta el momento tuvo lugar en el año 1859, donde se presentaron auroras boreales en Latinoamérica y parte de España, fuertes apagones en hidroeléctricas, las líneas entre Europa y Estados Unidos, conectadas por telégrafo, dejaron de funcionar, y las agujas de las brújulas se descontrolaron por completo.

Ahora, se espera que lleguen muchas más tormentas que tendrían graves consecuencias en la Tierra, especialmente en el 2025, por lo que actualmente la tarea de los científicos se basa en descubrir cómo hacer que los sistemas sean mucho más resistentes a las tormentas geomágneticas.

Pero, ¿podrían provocar algo en el cuerpo humano? La Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA) ha manifestado que no habría ninguna consecuencia directa; “La radiación dañina de una llamarada solar no puede atravesar la atmósfera de la Tierra para afectar físicamente a los humanos; sin embargo, cuando es lo suficientemente intensa, puede perturbar la atmósfera en la capa por donde viajan las señales de comunicaciones y GPS”.

Sin embargo, indirectamente las personas sí estarían siendo afectadas, pues hay una gran cantidad de daños que se pueden generar durante estas tormentas eléctricas, especialmente si se trata de una ‘caníbal’, pues suelen ser explosiones de radiación mucho más fuertes.

Las consecuencias

• Señales de comunicaciones y GPS se pueden ver afectadas, pues el canal por el que viajan es impactado y se genera una interrupción.
• Naves espaciales y señales de radio con latitudes de alta frecuencia también terminarían afectados, por lo que habría suspensión de vuelos de larga duración.
• Colapso en la conectividad mundial por cables submarinos afectados, lo que generaría que numerosos países se quedaran sin red.
• Muchas personas se quedarían sin electricidad en determinados puntos.
• Alimentos perecederos se perderían por el estancamiento de la distribución de agua.
• Afectaciones en la eliminación de aguas residuales.
• Pérdidas económicas