Por: Redacción Tecnología • Colombia.com

Joven de 22 años se ha gastado una "fortuna" para lucir como "el demonio"

Se llama Kierstyn y se ha gastado 47.000 dólares en cirugías, "para parecerse al demonio". 

Actualización
Aún le falta tatuarse la otra mitad del rostro, además quiere más cirugías "mórficas". Foto: Twitter @AlexBelfield
Aún le falta tatuarse la otra mitad del rostro, además quiere más cirugías "mórficas". Foto: Twitter @AlexBelfield

Se llama Kierstyn y se ha gastado 47.000 dólares en cirugías, "para parecerse al demonio". 

Kierstyn Milligan ha captado la atención del mundo, y es que con 22 años, se ha operado en varias oportunidad para poder "parecerse al demonio". Lo irrisorio, es que se ha gastado 47.000 dólares, el equivalente a casi 200 millones de pesos colombianos en cirugías. 

Según detallan medios especializados, Milligan quiere lograr "la apariencia demoníaca perfecta" y comenzó con decenas de tatuajes, entre los que destacan sus globos oculares, implantaciones dentales, perforaciones en nariz, lengua y pezones. 

“Siempre supe que quería lucir así, tuve esta visión en mi cabeza desde que era joven y finalmente la cumplí (...) Antes no tenía amor propio o incluso entendía quién era, ahora siento que me entiendo más a mí misma y tengo más amor y confianza", reveló la joven de 22 años. 

Kierstyn tiene casi 700 mil seguidores en TikTok, pero a pesar de que "quiere verse como un demonio", a sus seguidores les atraen los sus excentricidades. También ha pagado todas sus cirugía con dinero que ha generado en su cuenta de OnlyFans. Reveló que su transformación la inició cuando cumplió 14 años, allí confesó que le diagnosticaron dismorfia corporal y que todo este proceso de "transformación" le ha servido para sentirse más "confiada" en quién es y con su cuerpo. 

También, ha asegurado que todos sus tatuajes tienen homenajes a sus familiares, mientras que otros, son de mero placer, como el de un escorpión y una geisha, en difuminación que "considera tesoros en la piel". "Cuando algunas personas ven mis ojos, miran fijamente y señalan sin decir nada, otras me miran mal, y algunas se me acercan directamente a la cara y dicen que lo odian", indicó la joven en sus redes. 

Y aún, no termina, la realidad es que quiere "seguir pareciéndose a un demonio" y para lograrlo aún le falta tatuarse la otra mitad del rostro, además quiere más cirugías "mórficas".  La joven vive en Houston, Texas y además de estar en redes, también es bailarina y artista de tatuajes.