La importancia del sueño de los niños

Es recomendable para ellos establecer una serie de rutinas que estimulen los beneficios que tiene un buen descanso, ya que el sueño infantil cumple una función reguladora y reparadora en el organismo. 

“Hasta los cuatro años es recomendable que el niño haga dos siestas, una por la mañana y otra por la tarde. Debido a que después de los cuatro años va a empezar a tomar el tipo del sueño del adulto, que es un sueño nocturno completo y una siesta pequeña después del almuerzo”, recomienda Santiago Rojas, médico asesor en descanso para Americana de Colchones.

Esta siesta, según el médico deber ser corta, y el sueño debe ser largo, teniendo en cuenta que a partir de las 9:00 p.m. la hormona del crecimiento se libera en un gran porcentaje.

“A la hora de dormir adecuar el lugar con poca luz. Los niños deben acostarse a las ocho de la noche y levantarse idealmente a las seis de la mañana, antes no, porque esa última hora de sueño tiene que ver con el desarrollo cerebral, por eso poner a madrugar a los niños no es tan saludable”, agregó el asesor en descanso. 

Igualmente, y debido a que los niños tienden a ser muy calurosos se recomienda que tengan una buena temperatura corporal, por eso recomienda que duerman en colchones de látex que son los más frescos. 

La siesta en los niños

Para una buena salud y buen desarrollo físico y mental es vital fomentarles a los más pequeños la siesta.

Factores como el intenso calor por el que en muchas ocasiones atraviesa La Guajira en diferentes horas del día, las constantes madrugadas para ir al colegio y las extensas jornadas de estudio, se convierten en una buena excusa para que los niños descansen y que mejor que una siesta para recargar energías.

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Por esa razón, descansar es tan importante en los adultos como en los niños, ya que este importante hábito les ayuda a relajarse, a estar de buen humor, a reponerse de su actividad matutina y por su puesto contribuye en su desarrollo. 

Pero se ha preguntado alguna vez cuál es el periodo de cada siesta dependiendo de la edad. De acuerdo con el experto en descanso para Americana de Colchones, el médico Santiago Rojas, los periodos de descanso diurno se van acortando a medida que el niño va creciendo. Primero desaparece la siesta de la mañana y más tarde, más o menos a partir de los cuatro años, se elimina la de la tarde.

“A los recién nacidos nunca hacerlos dormir mecido ni en brazos. A esa edad ellos duermen la mayoría del tiempo. Mientras al niño, un poco más grande, se le debe permitir la siesta después de la comida y acostarlos después del atardecer y permitir que se despierte después del amanecer, no antes”, enfatiza Rojas.

Igualmente, recomienda que después al escolar favorecerle las 10 horas de sueño acostarlo temprano (8:00 p.m.) para permitir la liberación de la hormona del crecimiento y que se acueste de medio lado, sin ninguna luz directa sin estímulos visuales o auditivos. 

“Hasta los cuatro años es recomendable que el niño haga dos siestas, una por la mañana y otra por la tarde. Después de los cuatro años ya va a tomar el tipo del sueño del adulto, que es un sueño nocturno completo y una siesta pequeña después del almuerzo, la siesta debe ser corta y el sueño debe ser largo”, agregó el médico. 

Beneficios de la siesta: 

1. La siesta mejora la memoria 
2. Los niños desarrollan un mayor rendimiento psicológico y social
3. Ayuda a mejorar el rendimiento
4. Estimula la creatividad y la imaginación
5. Mejora el rendimiento escolar
6. Tranquiliza y disminuye la irritabilidad
7. Genera positivismo
8. Mejora la atención y el aprendizaje
9. Ayuda a crecer

Rutinas del sueño en el niño

El sueño es esencial para la salud y desarrollo del niño. Los niños que duermen lo suficiente funcionan mejor y son menos propensos a problemas de comportamiento e irritabilidad. Por eso es importante que los padres ayuden a desarrollar a sus hijos buenos hábitos de dormir desde una edad temprana.

Ya que las rutinas facilitan el sueño en los niños, pues les proporcionan seguridad y confianza al saber qué esperar cuando llega el final del día, y a la vez les brindarán la posibilidad de ir desarrollando su sentimiento de responsabilidad a medida que los vayan incorporando. Estos hábitos, por lo tanto, deben comenzar a establecerse desde temprana edad.

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De esta forma, según explica Santiago Rojas, médico asesor en descanso para Americana de Colchones, se deben seguir siempre unas mismas pautas, así como: 

1. Leer un cuento 
2. Establecer unas horas fijas para acostarse, levantarse y las siestas. 
3. La habitación debe ser tranquila y acogedora
4. Avisar media hora antes de la hora acordada para dormir
5. Establecer una hora de juego y comida teniendo en cuenta que debe haber un periodo de tranquilidad de una media hora antes de dormir.
6. Evitar estimulantes como la cafeína antes de dormir
7. Permitir que lleve objetos como los muñecos de peluche o mantas también pueden ayudar a que su hijo se sienta seguro