¿Cómo eliminar un grano de forma rápida y sin dejar marcas?

Seguramente te habrá pasado que preciso el día que tienes un evento importante aparece un pequeño infiltrado en tu cara con el que no contabas. Esta situación no sólo es frustrante, sino que se convierte en el problema más difícil de combatir, pues arruina por completo la imagen. 

Ya no habrá motivo para que te alarmes, pues estos productos mágicos te ayudarán a deshacerte de ese visitante en muy poco tiempo.

Crema dental

Este producto de higiene es maravilloso para quitar rápidamente un grano de la cara. Antes de acostarte a dormir, debes lavar bien tu rostro y aplicar la pasta sobre el grano para que actúe toda la noche. En la mañana, enjuaga con agua tibia; verás cómo irá desapareciendo. Ten en cuenta que este truco no es recomendable para personas con piel muy seca.

Foto: Jill Wellington en Pixabay

Jugo de limón

Pon un poco de zumo fresco de limón sobre tu grano para que comience a disminuir de tamaño. Los ácidos y las vitaminas que contiene esta fruta hacen que se seque rápidamente y que funcione como un antiséptico natural.

Hazlo en las noches antes de dormir para que el cítrico actúe y para que no corras el riesgo de que tu piel se manche con la exposición al sol.

Miel y canela

Esta mezcla no solo te ayuda a desinflamar el grano, también funciona como un hidratante para el rostro. Debes mezclar la miel y la canela hasta crear una pasta, luego aplícala sobre la piel limpia antes de acostarte. Puedes poner una toalla en la almohada para que no la manches.

Foto: Shutterstock

Aceite de lavanda

Este poderoso producto tiene propiedades dermatológicas que te ayudarán a desinflamar rápidamente la zona del grano. Para que sea más efectivo es recomendable que lo dejes enfriar en la nevera media hora antes de aplicarlo. También es importante que lo hagas antes de dormir, para que pueda actuar toda la noche.

Ajo

Antiséptico y antibacteriano, esto es más que suficiente para darse cuenta de lo beneficioso que puede llegar a ser. Coge un diente de ajo fresco, machácalo y aplícalo directamente sobre la zona afectada, o puedes partir un diente en dos y frotar uno de los pedazos sobre el grano. Déjalo actuar por 5 minutos y retíralo con abundante agua tibia.

Este proceso puedes repetirlo 3 o 4 veces al día, y verás cómo a la mañana siguiente será más pequeño o habrá desaparecido por completo.