Por: Redacción Vida y Estilo • Colombia.com

2 poderosas oraciones para las almas gemelas

Encontrar o conservar a tu alma gemela es muy sencillo poniendo en práctica alguna de estas 2 oraciones.

Actualización
Oraciones para las almas gemelas. Foto: Pixabay
Oraciones para las almas gemelas. Foto: Pixabay

Encontrar o conservar a tu alma gemela es muy sencillo poniendo en práctica alguna de estas 2 oraciones.

Hay quienes ya han logrado encontrar a la persona con la que esperan compartir el resto de su vida, y algunos otros que aún se encuentran a la espera de que su alma gemela finalmente llegue. No obstante, las oraciones que traemos en esta ocasión son para cualquier tipo de persona, sin importar su situación.

Esto se da debido a que podrás trabajar la llama violeta, una poderosa energía espiritual, ya sea con mantras u oraciones, para poder limpiar cualquier tipo de bloqueo o energía negativa que pueda existir entre tú y tu alma gemela.

Oración para encontrar a tu alma gemela

Encuentra finalmente a la persona que complementa tu alma. Foto: Pixabay
Encuentra finalmente a la persona que complementa tu alma. Foto: Pixabay

Dios sé que existe en este mundo una persona que tú has reservado para mí, y que es la otra mitad de mi alma. En lo más íntimo de mi ser, donde esta persona se encuentre en este momento, dondequiera que esté, la fuerza magnética del amor nos hará encontrarnos infaliblemente, y entonces se dará una unión armoniosa y bendecida por ti, mi Dios, y tu coro de ángeles cantará alabanzas en los cielos, en agradecimiento por esa tan grande felicidad en la tierra.

Yo te agradezco, Dios mío, por haber hecho la otra mitad de mi alma, y por conducirnos hasta esa unión feliz. Muchas gracias, señor. Que así sea.

Oración a San Antonio de Padua para encontrar el alma gemela

Puedes encomendarte a San Antonio de Padua, santo de los casamientos. Foto: Pixabay
Puedes encomendarte a San Antonio de Padua, santo de los casamientos. Foto: Pixabay

Para las peticiones complicadas puedes recurrir a San Antonio de Padua, santo de las cosas perdidas y de los casamientos, en este caso la labor es dar con el paradero de tu alma gemela. 

Acuérdate, glorioso San Antonio, amigo del niño Jesús, hijo querido de María inmaculada, de quien nunca se oyó decir que alguien, de los muchos que han recurrido a ti implorando tu protección, haya sido por ti San Antonio abandonado.

Animado y con la misma confianza vengo a ti, fiel consolador y amparador de los afligidos. Gimiendo bajo el peso de mis pecados, me presento a tus pies. Un simple pecador como yo, me atrevo a presentarme delante de ti.

No rechaces pues mi súplica (en este punto debes realizar tu petición), tú San Antonio que eres tan poderoso junto al corazón de Jesús, escúchala favorablemente y dígnate en atenderla. Amén.