Por: Redacción Vida y Estilo • Colombia.com

Oración de San Juan Eudes para la misericordia de Jesús y María

Hay una hermosa oración de misericordia a los corazones de Jesús y la Virgen María, creada por San Juan Eudes; a continuación de la mostramos.

Te enseñamos una oración de misericordia a los corazones de Jesús y María. Foto: Shutterstock
Te enseñamos una oración de misericordia a los corazones de Jesús y María. Foto: Shutterstock

Hay una hermosa oración de misericordia a los corazones de Jesús y la Virgen María, creada por San Juan Eudes; a continuación de la mostramos.

San Juan Eudes fue un misionero parroquial que desde muy pequeño demostró su amor y fidelidad a Dios; de hecho, se dice que cuando tenía apenas nueve años recibió una bofetada por parte de un compañero y en lugar de responder con golpes, siguió el consejo evangélico y puso la otra mejilla.

Se le conoce por haber fundado la Orden de Nuestra Señora de la Caridad, para ayudar a las mujeres a quienes les eran vulnerados sus derechos, y la Congregación de Jesús y María para la formación de los sacerdotes. Además, fue un increíble escritor espiritual, lo cual se ve reflejado en las hermosas plegarias que le pertenecen; hoy te enseñamos una de ellas.

Oración de misericordia a los corazones de Jesús y María

Oh benevolísimo y misericordísimo Corazón de Jesús, estampa en nuestros corazones una imagen perfecta de tu gran misericordia, para que podamos cumplir el mandamiento que nos diste: “Serás misericordioso como lo es tu Padre”.

Madre de la misericordia, vela sobre tanta desgracia, tantos pobres, tantos cautivos, tantos prisioneros, tantos hombres y mujeres que sufren persecución en manos de sus hermanos y hermanas, tanta gente indefensa, tantas almas afligidas, tantos corazones inquietos.

Madre de la misericordia, abre los ojos de tu clemencia y contempla nuestra desolación. Abre los oídos de tu bondad y oye nuestra súplica. Amorosísima y poderosísima abogada, demuéstranos que eres en verdad la Madre de la Misericordia.

Oh Jesús, el Unico Hijo de Dios, el Unico Hijo de María, te ofrezco el corazón bondadosísimo de tu Madre Divina, el cual para ti es el más precioso y agradable de todos. Oh María, Madre de Jesús, te ofrezco el corazón sagradísimo de tu amado Hijo, quien es la vida y el amor de tu Corazón.

Te saludamos, corazón santo; te saludamos, corazón manso; te saludamos, corazón humilde; te saludamos, corazón puro; te saludamos, corazón sacerdotal; te saludamos, corazón sabio; te saludamos, corazón paciente; te saludamos, corazón obediente; te saludamos, corazón atento a la voluntad del Padre; te saludamos, corazón fiel; te saludamos, corazón fuente de felicidad; te saludamos, corazón misericordioso; te saludamos, corazón amante.

San Juan Eudes fue un sacerdote y fundador de los eudistas. Foto: Twitter @Betaniaorg

Te adoramos, te alabamos, te glorificamos, te damos gracias, te amamos, con todo nuestro corazón, con toda nuestra alma, con todas nuestras fuerzas. Te ofrecemos nuestro corazón, te lo damos, te lo consagramos, te lo ofrecemos; recíbelo y poséelo totalmente, purifícalo, ilumínalo, santifícalo, y vive y reina en él, ahora y por siempre jamás.

Yo te saludo, María, Hija de Dios Padre; yo te saludo, María, Madre de Dios Hijo; yo te saludo, María, esposa del Espíritu Santo; yo te saludo, María, Templo de la Divinidad; yo te saludo, María, Virgen de las vírgenes, de quién el Rey de los cielos ha querido nacer; yo te saludo, María, Reina de los mártires; yo te saludo, María, Reina del mundo; yo te saludo, María, Reina de mi corazón; yo te saludo, María, llena de gracia.

Bendito sea el fruto de tus entrañas, Jesús; bendito sea tu esposo, san José; bendito sea tu padre, san Joaquín; bendita sea tu madre, santa Ana; bendito sea tu hijo, san Juan; bendito sea tu ángel, san Gabriel; benditos sean todos aquellos que te aman y te bendicen. Amén.