4 trucos que debes probar si quieres usar tacones sin sentir dolor: son muy efectivos

Los tacones son accesorios muy versátiles. No solo aportan mucha elegancia, sino que también pueden transformar cualquier look casual en uno más formal en cuestión de segundos. Sin embargo, pueden convertirse en una verdadera tortura cuando se usan por mucho tiempo.

Existen diferentes tipos de tacones, desde los stilettos, que aunque son de los más formales, también son los más incómodos; hasta los que tienen plataforma, que son mucho más fáciles de llevar. Sea cual sea tu estilo, la clave para usar tacones sin dolor está en elegir el par adecuado para ti. 

A la hora de comprar tacones hay varios factores que debemos tener en cuenta. El primero de ellos es la talla correcta. Los zapatos de tacón abiertos; es decir, que no tienen correa, deben ajustar a la perfección, de lo contrario será muy difícil mantenerlos en el pie y la presión ejercida provocará mucho dolor en poco tiempo de uso. 

Si no eres muy hábil manejando este tipo de calzado, lo ideal será elegir un zapato cerrado y con plataforma. La plataforma te ayudará a caminar con más seguridad, ya que el pie no estará tan empinado. 

Si eres experta en caminar en tacones, pero aun así te cansas con facilidad y sientes mucho dolor en tus pies al terminar el día, a continuación te compartimos algunos trucos que según el portal Mejor con Salud te ayudarán a aguantar los zapatos altos por más tiempo. 

1. Mete los zapatos al congelador: este truco es ideal para aquellos zapatos que son en punta y tallan demasiado en la parte delantera del pie. La clave está en meter dos bolsas de agua en el interior de los zapatos y llevarlos al congelador por algunas horas hasta que se congelen por completo. El hielo ayudará a que el material se expanda. 

2. Venda tus dedos: según expertos en moda y belleza, unir con un espaladrapo o cinta suave el tercer y cuarto dedo del pie ayudará a tener una mayor estabilidad al caminar con tacones. 

3. Usa talcos: por obvio que parezca, muchas mujeres prescinden del uso de talcos para los pies; sin embargo, este producto puede ayudar a evitar que la transpiración y la humedad hagan más incómodo un zapato. 

4. Usa almohadillas y plantillas cómodas: en el mercado podemos encontrar infinidad de opciones para hacer nuestros tacones más cómodos. Si tu calzado te genera molestia en la parte trasera, puedes optar por usar almohadillas que no solo evitarán rozaduras, sino que harán más acolchada esa zona.