¿Qué pasaría si un perfumista se inspira en arte de la alta cocina?

La perfumería y la gastronomía son similares, similares porque la alta cocina es el arte de combinar ingredientes para crear una receta única. Lo mismo pasa con la perfumería: es el arte de combinar esencias para conquistar el olfato.

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Lucir y oler bien es sin duda un arma infalible de seducción tanto para hombres como para mujeres. Una táctica de conquista que denota cercanía, creatividad, encanto y que les da a los hombres Savour, un plus frente a otros conquistadores, pues encuentran un  arma infalible de conquista  en una buena cena, un espacio íntimo y una buena fragancia.

Inspirados en el delicado arte de la alta cocina, Yanbal presenta su nueva fragancia masculina “Savour”, un aroma atrevido y novedoso capaz de resaltar el lado más creativo de los hombres.

Savour cuenta con ingredientes, que también se usan en la alta cocina, pero muy poco en la perfumería, se convierten en el punto de partida para envolver todos los sentidos. La pimienta molle, ingrediente propio de los Andes Peruanos, es la nota protagónica de este aroma que aporta un picor aromático muy novedoso; fusionándose sutilmente con el haba tonka y el limón peruano, logrando una impresión chispeante y refrescante que fascinará tanto a ellos cuando la usen, como a ellas cuando huelan a sus parejas.

¡Un aroma para hombres creativos que disfrutan los placeres de la vida!

¿Por qué la perfumería y la gastronomía se complementan a la perfección? Ambas son experiencias sensoriales. En la perfumería, el olfato es el dominante. En la cocina, el gusto, el olfato y la vista son los sentidos predominantes.

Ambas trabajan sobre aromas y esencias. Hay una alquimia de sabores y olores que se van mezclando y transformando, para crear nuevas sensaciones.

Las dos exigen creatividad y pasión para producir creaciones únicas. Las dos despiertan el deseo. Un perfume es agradable al olfato, evoca el olor de una persona, se mezcla con su propio aroma y genera también un deseo de estar cerca. Una comida debe verse apetitosa, saber rico y oler bien.

Cuando un hombre Savour cocina para una mujer hay implícita una velada intención de agradarle y de seducirla a través de su paladar. Así como cuando un hombre se aplica una fragancia como Savour también tiene una intención de agradar, de oler bien y de seducir con su aroma, ahí está el secreto de los hombres de la actualidad.

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