Por: Redacción Vida y Estilo • Colombia.com

Oración a San Ramiro de León para conseguir trabajo urgente

Si quieres conseguir un nuevo trabajo pronto, puedes rezar la oración que hoy te enseñamos a San Ramiro de León y sus 12 compañeros mártires.

Oración de hoy: reza esta plegaria para conseguir trabajo urgente. Foto: Shutterstock
Oración de hoy: reza esta plegaria para conseguir trabajo urgente. Foto: Shutterstock

Si quieres conseguir un nuevo trabajo pronto, puedes rezar la oración que hoy te enseñamos a San Ramiro de León y sus 12 compañeros mártires.

San Ramiro de León y sus 12 compañeros mártires, perecieron a manos de los arrianos; a ellos se les conmemora cada 13 de marzo. Aprovechando esto, puedes encomendarte a ellos cuando tengas grandes necesidades, motivo por el cual hoy te enseñamos una poderosa oración para que intercedan por ti ante el cielo, para conseguir un nuevo trabajo urgentemente.

Oración para conseguir trabajo urgente

¡Oh mi amado san Ramiro!, elegido por nuestro Señor para defender su linaje divino frente a los herejes del mundo, acudo a ti en estas horas desesperadas porque Tú eres el único que puede auxiliarme y sacarme de esta situación para acabar con esta angustia, y por ello te suplico: dame un trabajo, dame un trabajo, dame un trabajo.

¡Oh mi venerado san Ramiro!, tú que entregaste tu vida y la de tus doce monjes para convertirlos en mártires de tu causa, y así condujiste tu rebaño al paraíso para ser recibidos como héroes, así te pido que me lleves hasta mi nuevo trabajo, y por ello te pido: dame un trabajo, dame un trabajo, dame un trabajo.

¡Oh mi alabado san Ramiro!, tú, que iluminas al mundo con tu cetro resplandeciente y tu amor incondicional, confío en Ti y contigo nada temo, aprueba mi petición que, con mucha humildad y sencillez, realizo a tu nombre: dame un trabajo, dame un trabajo, dame un trabajo.

¡Oh mi adorado san Ramiro!, me rodeas con tus fuertes brazos y haces que me sienta seguro, te amo porque me colmas de gracias y favores celestiales cada vez que acudo con mis penas ante Ti, cada vez que confiadamente solicito tu auxilio para conseguir un trabajo: dame un trabajo, dame un trabajo, dame un trabajo.

¡Oh mi apreciado san Ramiro!, sé que ayudaste a otros a conseguir un buen trabajo, y yo estoy estancado, lo intento y no lo consigo, sabes que me hace falta con urgencia, mis necesidades son extremas y desesperadas, por ello te ruego encarecidamente me des tu amorosa asistencia: dame un trabajo, dame un trabajo, dame un trabajo.

¡Oh mi querido san Ramiro!, tú que sabes todo lo padecido en mi sufrida existencia, líbrame de caer inocentemente en manos de explotadores, abusadores, negreros o esclavistas, que abundan en estos tiempos de guerras y miserias, y que pudieran dañar mi alma o mi cuerpo alejándome del goce de venerarte por siempre: dame un trabajo, dame un trabajo, dame un trabajo

¡Oh mi estimado san Ramiro!, tú que haces resplandecer la Luz Eterna con tu bastón, extiende tus benefactoras manos una vez más sobre mí y ven a ayudarme en mi adversidad, quita el hambre y la miseria de mi vida iluminando a mi futuro patrón para que me dé un trabajo, estable y permanente, con un jornal justo, pues mi nuevo patrón será generoso en dádivas y alabanzas: dame un trabajo, dame un trabajo, dame un trabajo.

¡Oh mi favorito san Ramiro!, hermano y amigo de los necesitados y nunca nos dejas solos para que no nos extraviemos y que estás a nuestro lado, ten piedad de mí y asísteme en mis apuros y carencias, ten compasión de mí y líbrame de mis problemas, y como singular mediador, entre el Señor y los hombres, presenta mis súplicas ante Él para que sean atendidas: dame un trabajo, dame un trabajo, dame un trabajo.

¡Oh mi dilecto san Ramiro!, así como abriste las puertas del cielo, así te pido que abras las puertas de mi nuevo trabajo, y que pueda entrar, como entraron tus discípulos al paraíso, con gallardía y valor, y que me traten con respeto, dignidad y amor: dame un trabajo, dame un trabajo, dame un trabajo.

¡Oh mi caro san Ramiro!, quiero ser digno de ti, tómame también a mí para ser uno más de tus monjes, que tu luz divina, reflejo de nuestro Señor, caiga sobre mí llenándome de gozo y bendiciones, para que mi nuevo amo no dude en acogerme al verme: dame un trabajo, dame un trabajo, dame un trabajo.

¡Oh mi idolatrado san Ramiro!, te doy gracias desde ahora por tu divina intercesión y sé que estás trabajando, junto a tus doce mártires, para que mi situación mejore y la abundancia llegue a mi vida y la de mis seres queridos, de una vez, y para siempre: dame un trabajo, dame un trabajo, dame un trabajo. ¡Oh san Ramiro!, ¡bendito seas por siempre!, ¡bendito sea tu santo nombre!, ¡gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo! Así sea. Así es. Así está hecho. Amén.