Por: Alexandra Méndez • Colombia.com

Bebés irritables: carencias alimentarias en recién nacidos fomentan su irritabilidad, según estudio

Un nuevo estudio reveló que la alimentación infantil está estrechamente relacionada con el humor de los bebés.

Carencias alimentarias en recién nacidos fomentan su irritabilidad. Foto: Shutterstock
Carencias alimentarias en recién nacidos fomentan su irritabilidad. Foto: Shutterstock

Un nuevo estudio reveló que la alimentación infantil está estrechamente relacionada con el humor de los bebés.

La alimentación juega un papel primordial en el desarrollo cognitivo y físico de los bebés e infantes. De hecho, cifras oficiales de la Organización Mundial de la Salud indican que “un 45% de las defunciones de niños se asocia a la desnutrición”. 

Aunque este tema ha estado en la agenda desde hace muchos años, aún son muchas las carencias alimentarias que existen en los menores alrededor del mundo. La misma entidad señala que “Para 2025, se calcula que 149 millones de niños menores de 5 años tendrán retraso en el crecimiento (serán demasiado pequeños para su edad), 45 millones sufrirán emaciación (estarán demasiado delgados para su estatura) y 37 millones tendrán sobrepeso o serán obesos”. 

Por lo anterior, es fundamental promover la alimentación saludable en la primera infancia y sobre todo la lactancia materna exclusiva durante los primeros seis meses de vida, ya que expertos de la OMS explican que “si todos los niños de 0 a 23 meses estuvieran amamantados de forma óptima, cada año se les podría salvar la vida a más de 820 000 niños de menos de 5 años”. 

Se sabe que la lactancia materna ayuda no solo a mantener nutrido al menor, sino que también mejora su coeficiente intelectual y la asistencia a la escuela, además este factor está asociado a mayores ingresos en la vida adulta, según un estudio publicado en la revista The Lancet. 

Pero en fechas recientes se descubrió un nuevo beneficio de la lactancia materna en los recién nacidos. De acuerdo con investigadores del Centro Médico del Hospital Infantil de Cincinnati, en Estados Unidos, La inseguridad alimentaria en el hogar puede afectar negativamente el comportamiento y la salud mental de un recién nacido, y hacerlo más irritable e inflexible.

El estudio publicado en la revista Jama Pediatrics, señala que una alimentación deficiente en los neonatos está directamente relacionada con su desarrollo cognitivo y su humor. 

El análisis se realizó recolectando datos de más de 1.500 lactantes en sus primeros seis meses y comparando las necesidades sociales de sus familias relacionadas con su salud por medio de una Lista de Comprobación de Síntomas Pediátricos (BPSC, por sus siglas en inglés).

La pediatra Chidiogo Anyigbo, autora del estudio e investigadora del Centro Médico del Hospital Infantil de Cincinnati, Estados Unidos, señaló en la investigación que una razón para la escasez de estudios sobre recién nacidos es la percepción errónea de que son personas incompletas y que no recordarán sus experiencias. 

"Pero sabemos que lo que ocurre en la niñez tiene repercusiones hasta la edad adulta, por lo tanto, es crucial centrarnos en ellos, ya que los primeros meses sientan las bases para gran parte de sus vidas", expresó Anyigbo a SciDev.Net.

Los investigadores llegaron a la conclusión de que la inseguridad alimentaria tiene una estrecha relación con los problemas de comportamiento en los bebés. “Son bebés inquietos, que se ponen tan irritables que es difícil consolarlos o calmarlos. Cuando pasan de una cosa a otra les cuesta mucho adaptarse”, finalizó la investigadora.