Hombre murió por exceso de vitamina D, la que obtenemos del sol: esto se sabe
El hombre se habría suplementado por un periodo prolongado con una cantidad excesiva.
El hombre se habría suplementado por un periodo prolongado con una cantidad excesiva.
La vitamina D es una de las sustancias fundamentales que el cuerpo necesita para su adecuado funcionamiento. Esta vitamina es muy peculiar, pues es una de las pocas que el cuerpo puede producir por sí mismo con la ayuda del sol, aunque también se puede obtener de algunos alimentos, pero en menor concentración.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Salud de Estados Unidos (INS), la función principal de esta vitamina es “ayudar al cuerpo a absorber el calcio, una de las principales sustancias necesarias para tener huesos fuertes”.
Los expertos explican que “junto con el calcio, la vitamina D contribuye a prevenir la osteoporosis, una enfermedad que hace que los huesos se vuelvan más delgados y débiles y sean más propensos a fracturas”.
Aunque la deficiencia de vitamina D puede representar un riesgo para la salud causando síntomas como: fatiga, debilidad y/o dolor muscular, dolor en las articulaciones y depresión, su exceso en el organismo también puede ser muy peligroso.
De hecho, en fechas recientes se dio a conocer el caso de un hombre que falleció por tomar demasiada vitamina D. El caso se registró en Reino Unido y la víctima fue identificada como David Mitchener, un empresario de 89 años.
Este hombre llegó al servicio de urgencias con varias complicaciones tras pasar 9 meses tomando un suplemento de vitamina D. Según el reporte médico, Mitchener desarrolló una hipercalcemia, afección en la que los niveles de calcio en la sangre son superiores, la cual lo llevó a la muerte.
Pese al esfuerzo de los médicos por bajar sus niveles de calcio que estaban en el rango máximo, el paciente perdió la batalla y falleció a causa de una hipervitaminosis D, que le provocó insuficiencia cardíaca y renal, y toxicidad, así lo detalló el informe forense.
“Los suplementos vitamínicos pueden tener riesgos y efectos secundarios potencialmente muy graves cuando se toman en exceso”, advirtió Jonathan Stevens, forense que atendió el caso. Lo que ocasionó el fallecimiento fue que David estuvo tomando una dosis de 150.000 UI de Vitamina D, más de 300 veces de la cantidad que se aconseja ingerir.