Negligencia médica: a joven le diagnosticaron un embarazo cuando en realidad tenía cáncer en etapa 4

En el mundo de la salud y de la medicina existen gran variedad de enfermedades enigmáticas que se pueden confundir con otras por su sintomatología. Esta situación puede ser muy grave, pues un diagnóstico tardío puede traer consecuencias severas e incluso causar la muerte. 

Este fue el caso de, Halle Pollard, una joven originaria de Brighton, Inglaterra, cuya historia le está dando la vuelta al mundo, pues a sus 15 años le diagnosticaron un embarazo, cuando en realidad tenía un agresivo cáncer en etapa 4.

Según lo reseñado por diversos diarios británicos, la joven acudió un día al hospital porque padecía constantes dolores de espalda que le impedían continuar con sus actividades diarias. En un inicio los médicos le indicaron que este era un claro síntoma de embarazo; sin embargo, Pollard sabía que eso no podía ser posible.

Lo más extraño del caso fue que al realizarle la prueba que constataba este diagnóstico, dio positivo. “Sabía que no podía estar embarazada. Solo tenía 15 años y sabía que era imposible”, dijo Halle sobre el hecho.

Al recibir un diagnóstico erróneo, esta mujer tuvo que vivir todo un calvario, pues tenía severas molestias que la inmovilizaban y la hacían sentir muy cansada y sin fuerzas para hacer nada, y aún así los médicos no le daban un tratamiento adecuado.

De acuerdo con la joven, quien entregó una entrevista al medio Metro Uk, siempre que acudía al médico recibía los mismos diagnósticos. Después de descartar un embarazo a través de una resonancia de ultrasonido, los especialistas le indicaron que sus síntomas eran a causa de una infección urinaria o ciática. 

“Todo esto era anormal. El dolor de espalda era tan horrible que no podía sentarme, acostarme o caminar”, relató la joven, al medio citado.

Finalmente, luego de muchas pruebas, estudios y análisis recibió un diagnóstico que la dejó perplejo y conmocionada, pues en realidad tenía cáncer de ovario prolongado hasta los pulmones en etapa cuatro. “Tenía 42 tumores en mis pulmones y un tumor en el ovario” narró. 

Al darse cuenta de esto, tuvo que ser ingresada de inmediato en un quirófano para extirparle los agentes malignos. En total tuvo cuatro sesiones de quimioterapia y dos cirugías. Por fortuna, al cabo de nueve meses logró superar la enfermedad. 

“Lo último que quería era que mi apariencia cambiara. Perder el cabello fue muy duro, al igual que no poder hacer las cosas que hacían mis amigos, porque la quimioterapia había destruido por completo mi sistema inmunológico”, manifestó. 

Ahora, Halle busca que su historia se conozca para generar conciencia en torno al cáncer de ovario. La joven hace énfasis en la necesidad de su detección temprana para evitar consecuencias mucho más graves e incluso la muerte.