Por: Alexandra Mendez • Colombia.com

Virus de Marburgo: la enfermedad mortal que tiene en alerta a la comunidad internacional

Miembros de la OMS ya se reunieron para evaluar los riesgos del virus.

Miembros de la OMS ya se reunieron para evaluar los riesgos del virus.

En fechas recientes, la comunidad internacional entró en alerta por el brote de una enfermedad parecida al ébola, conocida como el virus de Marburgo, que ya ha causado varías muertes en Guinea Ecuatorial.

La Organización Mundial de la Salud (OMS), informó este lunes que hasta el momento se han reportado las muertes de al menos nueve personas de la provincia de Kié-Ntem, a causa de este virus que tiene una mortalidad que oscila entre el 24 por ciento y el 88 por ciento, según la respuesta que se de para controlar el brote. 

Según el informe, hay 16 casos sospechosos de personas que presentan síntomas como fiebre, fatiga, diarrea y vomitos. La OMS organizó una reunión de emergencia este martes, para analizar el brote del virus y sus riesgos para la comunidad a nivel mundial.

En el encuentro también se analizó la situación actual de la investigación de vacunas contra el virus similar al del ébola, pues aunque hay una treintena de candidatas, todas están en periodo de ensayos clínicos y ninguna ha sido aprobada hasta el momento. 

Todo lo que debe saber del virus de Marburgo

De acuerdo con lo analizado por la OMS, este virus es uno de los patógenos más peligrosos que se conocen en la actualidad, ya que además de que tiene una rápida propagación por el organismo, infectando y destruyendo las células de la sangre, el hígado y la piel, se incuba en un periodo de tiempo muy corto.

Éste virus se transmite a través de fluidos corporales como la sangre, la orina o la saliva, aunque esta última forma de contagio es la menos probable, pues las partículas no duran mucho tiempo vivas en el aire. 

Las personas contagiadas de este virus pueden presentar síntomas como la aparición repentina de fiebre, dolor intenso de cabeza, dolores musculares, hemorragias en la piel y las mucosas y problemas en la boca, los ojos, el tracto gastro intestinal y los órganos internos.

En los casos más graves, los pacientes pueden llegar a sufrir parálisis neurológica o shock hemorrágico, generando un fallo orgánico y circulatorio severo hasta conducir a la muerte. Sin cuidados médicos intensivos, la mayoría de las personas infectadas fallecen.

El tratamiento para esta enfermedad consiste en cuidados médicos intensivos para reducir los síntomas más graves, pues aún no existen medicamentos ni vacunas contra el virus de Marburgo. Los pacientes tienen que ser aislados debido al alto riesgo de infección. 

En la mayoría de los casos, se utilizan medicamentos para evitar la pérdida de líquidos, fármacos para estabilizar la tensión arterial, reducir la fiebre o detener la diarrea y transfusiones de sangre y agentes coagulantes para ralentizar y detener la pérdida extrema de sangre. 

Cabe destacar que la enfermedad fue detectada por primera vez en 1967 por técnicos de un laboratorio que resultaron infectados cuando investigaban monos procedentes de Uganda, en la ciudad alemana de Marburgo, motivo al que se le atribuye su nombre.