Por: Redacción Actualidad • Colombia.com

“Revolución profunda y acelerada” a la justicia venezolana será realizada por esposa de Maduro y Diosdado Cabello

Con miras a reducir el hacinamiento en las cárceles y diferentes sitios de reclusión en Venezuela, el presidente Nicolás Maduro encomendó a su esposa, Cilia Flores y a Diosdado Cabello, segundo en el Gobierno, la misión de generar una “revolución” de la justicia en un plazo de 60 días.

Nicolás Maduro quiere enfrentar el problema del hacinamiento en las cárceles con una "revolución judicial". Foto: Twitter @AJEnglés
Nicolás Maduro quiere enfrentar el problema del hacinamiento en las cárceles con una "revolución judicial". Foto: Twitter @AJEnglés

Con miras a reducir el hacinamiento en las cárceles y diferentes sitios de reclusión en Venezuela, el presidente Nicolás Maduro encomendó a su esposa, Cilia Flores y a Diosdado Cabello, segundo en el Gobierno, la misión de generar una “revolución” de la justicia en un plazo de 60 días.

El poder judicial en la República Bolivariana de Venezuela tendrá una reforma, así lo anunció su presidente Nicolás Maduro Moros en una presentación ante el canal de televisión estatal VTV, esto como consecuencia de los graves problemas que se presentan en el país con el hacinamiento en las cárceles y para llevar esta misión de transformación escogió a dos personas, su esposa y a Diosdado Cabello, el número dos del gobierno.

Diosdado Cabello es ampliamente conocido por ser el vocero de las políticas estatales, además de ser un hombre que habitualmente hace uso de las plataformas de medios para realizar acusaciones en contra de los opositores del Gobierno venezolano.

Cilia Flores, de 62 años, es la esposa del mandatario, Nicolás Maduro, es abogada y diputada del Parlamento Nacional y es reconocida porque en el año 2006 se convirtió en la primera mujer en Venezuela en ser elegida presidenta de la Asamblea Nacional.

El presidente Maduro encomendó a Flores y a Cabello, la tarea de llevar a cabo una “revolución profunda y acelerada del sistema judicial” en un plazo de 60 días. “En Venezuela hace falta una revolución que estremezca, que sacuda, que transforme todo el sistema judicial del país”, afirmó el primer mandatario venezolano.

El hacinamiento en Venezuela ha sido denunciado ampliamente y se afirma que, los detenidos en estaciones de la policía igualan a la población carcelaria en los lugares oficiales de reclusión, la misión de Diosdado Cabello es la de vaciar los calabozos y mejorar las condiciones de los reclusos, que en muchos casos presentan deficientes condiciones de alimentación y saneamiento básico.

“Asumimos esta responsabilidad como un necesario estremecimiento del Poder Judicial. Ha mejorado sustancialmente, pero no lo necesario”, indico Diosdado Cabello luego de su designación.

La capacidad carcelaria en Venezuela es de 26.000 presos, sin embargo, existen 37.000 distribuidos en 52 prisiones y las denuncias por atropellos a los Derechos Humanos y delitos de lesa humanidad han sido denunciados ante la comisionada para las Naciones Unidas, la expresidenta chilena, Michelle Bachelet.

La Comisión Internacional de Juristas de América Latina presentó un informe en el que denuncian que en Venezuela existe una parcialidad del poder judicial desde su máximo estrado, controlado políticamente por el Partido Socialista Unido de Venezuela, que dirige operativamente Diosdado Cabello.