Decenas de familias desplazadas por la violencia en el Chocó llegaron a Bogotá y se instalaron en la terminal

Sobre la madrugada de este lunes, 4 de diciembre, al menos 48 familias provenientes del departamento del Chocó, de la comunidad indígena La Meseta, llegaron desplazadas a la ciudad de Bogotá por cuenta de los enfrentamientos que se han venido presentando entre grupos armados que tienen azotada la comunidad. 

Sobre las 3:00 de la madrugada la comunidad arribó a la terminal de transporte el Salitre, y tuvieron que instalarse con sus pocas pertenencias a las afueras del recinto tras ser expulsados, según denuncian, sin importar que entre los miembros de la comunidad desplazada figuran, en su mayoría, niños menores de 10 años y adultos mayores.

Por su parte, Jairo Tunay, gobernador del resguardo indígena Tadó, expuso que los choques bélicos entre el ELN y las fuerzas militares han motivado a que los indígenas abandonen el territorio por temor a perder sus vidas.

“Hubo un enfrentamiento entre la guerrilla y pienso que con la Fuerza Militar. Entonces, desde ahí, pues las entidades que corresponde resolver este tema no nos atendieron. Entonces, las instituciones nos incumplieron. Por eso la comunidad se vino”, relató el líder indígena.

Según explicó el líder de la comunidad indígena de Tadó, Nelson Sintuá, en entrevista para el matutino de Arriba Bogotá, alrededor de 150 personas llegaron a la capital este lunes, entre ellos, hay niños, niñas, adultos mayores”, además alertó que más personas “vienen en camino”.

“Vienen más familias atrás, porque el tema es muy preocupante allá, entonces, lo daremos a conocer a las autoridades (...) vamos a estar aquí ubicados hasta que las entidades nos atiendan, como comunidad indígena del municipio Tadó por primera vez estamos acá”, dijo el líder indigena.

Pese a que el Ejército de Liberación Nacional (ELN) anunció el levantamiento del paro armado la noche del sábado, 2 de diciembre, la Defensoría del Pueblo informó que más de 80 comunidades étnicas estuvieron en riesgo, desde el día martes, cuando se impuso la medida. Por el momento, los líderes del colectivo Tadó exigen la presencia de las autoridades distritales y nacionales con el fin de atender la emergencia humanitaria por la que atraviesan los indígenas.

Cabe mencionar que, en el parque Nacional permanecen cerca de 500 indígenas acampando desde el mes de octubre, mientras que los centros de acopio, como los de La Florida y La Rioja se encuentran desbordados.