Delincuentes robaron una iglesia en el norte de Bogotá aprovechando que los feligreses estaban en misa
Los delincuentes aprovecharon el momento de la misa para ingresar y llevarse todas las herramientas de construcción con las que estaban arreglando la iglesia.
Los delincuentes aprovecharon el momento de la misa para ingresar y llevarse todas las herramientas de construcción con las que estaban arreglando la iglesia.
Un nuevo caso de inseguridad se dio a conocer en el norte de la ciudad de Bogotá, esta vez, sin importarles la religión ni la devoción por Dios, unos delincuentes ingresaron a una iglesia mientras las personas se encontraban en misa y robaron materiales de construcción del templo, que se encuentra en reparación.
El hecho ocurrió en la noche del miércoles 14 de agosto en el barrio Rionegro, localidad de Barrios Unidos, al parecer cinco delincuentes que se movilizaban en un vehículo bajaron y rompieron los candados de la parte de atrás del templo en donde los maestros de obra guardaban las herramientas que estaban utilizando para hacer los arreglos y mejoras del templo de Guadalupe.
En diálogos para el Ojo de la Noche, de Noticias Caracol, el sacerdote de la iglesia informó que no es la primera vez que sucedo esta situación: “Han sido dos veces que nos han robado. Hoy, la sorpresa más grande es que estábamos en la celebración eucarística y después de que yo salgo me dicen los seminaristas que nos robaron”.
El sacerdote aseguró que es una situación muy triste para la comunidad de la iglesia, que se había esforzado bastante para poder reunir el dinero para costear los arreglos que requiere el templo: “Subimos revisar las cámaras a ver qué había acontecido y nos dimos cuenta de que es un crimen de personas bien organizadas. Rionegro es muy inseguro y nos sentimos muy vulnerables”, aseguró.
El mayor problema es que robaron todas las herramientas y pequeñas máquinas que usaban para la construcción y las cuales suman unos 38 millones de pesos. Pero además las personas que estaban trabajando en esta obra, que son decenas, quedaron sin trabajo, pues sin las herramientas no pueden terminar con la construcción.
“Nos robaron canguros, compactadores, pulidoras, tronzadoras, martillos demoledores, etcétera. Nosotros, en este momento, tenemos 20 personas trabajando, pero no hay herramienta para laborar”, aseguró uno de los trabajadores encargado de la obra.