Quinamayó, el pueblo colombiano que celebra la Navidad en febrero y de una manera muy diferente
Se trata de Quinamayó, un pequeño poblado en el Valle del Cauca donde la celebración tradicional de Navidad tiene otras costumbres.
Se trata de Quinamayó, un pequeño poblado en el Valle del Cauca donde la celebración tradicional de Navidad tiene otras costumbres.
Llegó diciembre, y con este mes las celebraciones navideñas que encienden la mayor parte del mundo con luces, música y comida típica. Sin embargo, a pesar de la gran influencia española que aún persiste en Colombia, hay un pueblo que se resiste a las tradiciones de esta época y dejó de lado la blanca Navidad tal y como la conocemos.
Se trata de Quinamayó, una pequeña población del Valle del Cauca, en donde sus habitantes han decidido celebrar la Navidad de otra manera. Para empezar, el nacimiento del niño Jesus no se festeja en el mes de diciembre como se hace tradicionalmente, sino hasta el 16 de febrero.
Lo más curioso de esta celebración es que la figura del niño Dios no es la que se conoce comúnmente, pues representado las características físicas de los pobladores de Quinamayó que son principalmente afrocolombianos, todos los protagonistas de la Navidad son negros.
Según cuentan algunos de los pobladores de Quinamayó, esta tradición viene de sus ancestros, quienes sufrieron el flagelo de la esclavitud. Explican que sus antepasados tuvieron que modificar la fecha de la Navidad porque tenían que atender a sus amos en diciembre y no podían organizar sus fiestas, por lo tanto, decidieron festejar estas fechas cuando se cumplieran los 45 días de dieta de la Virgen María.
Quinamayó es un corregimiento ubicado a una hora y media de la ciudad de Cali. Y aunque muchos de sus habitantes han salido del caserío para buscar mejores oportunidades en las ciudades, regresan cada año para adorar al “Niño Dios Negro”.
“Febrero es el mes preferido para nuestra comunidad. Es nuestro diciembre, prácticamente. Aquí todas las familias se unen para que sea un éxito total el recorrido que se va por todas las cuadras del pueblo”, indicó a EFE Mónica, una de las seis “cantaoras” que suele tener el evento.
¿Cómo se celebra la navidad en Quinamayó?
La celebración inicia con una oración en una casa del vecindario, en donde los pobladores del corregimiento encomiendan que la rumba, que se extiende cuatro días, sea un éxito y que nada malo les ocurra.
Seguido, se lleva a cabo una procesión en la cual los protagonistas son los bailes, disfraces y la música en vivo al ritmo de los tambores, percusión, saxofones y clarinetes. Durante la fiesta, las sonrisas de los asistentes se mezclan con gritos que dicen: “Al Niño Dios hay que adorar”.