El caso que estremeció a Bogotá: Laura Camila Blanco no se suicidó, fue asesinada

La muerte de la periodista Laura Camila Blanco dejó de ser un presunto suicidio para convertirse en un caso de feminicidio agravado

Por: Felipe Téllez • Colombia.com
Laura Camila Blanco. Foto: Twitter @SeptimoDiaTV
Laura Camila Blanco. Foto: Twitter @SeptimoDiaTV

La muerte de la periodista Laura Camila Blanco dejó de ser un presunto suicidio para convertirse en un caso de feminicidio agravado

La muerte de la periodista Laura Camila Blanco, de 27 años, ocurrida el 27 de julio de 2025, estremeció a Bogotá. La joven comunicadora cayó desde el noveno piso de su apartamento, ubicado en el barrio Salitre, al noroccidente de la capital. En un inicio, las autoridades consideraron la posibilidad de un suicidio, pero la investigación dio un giro decisivo cuando Medicina Legal determinó que Laura fue estrangulada y asfixiada antes de la caída.

El hallazgo llevó a la captura de su pareja, Óscar Santiago Gómez, señalado como principal sospechoso e imputado por el delito de feminicidio agravado. La noticia provocó indignación y revivió el debate sobre la violencia de género en el país.

Una relación marcada por los celos

Según testimonios recogidos por el programa Séptimo Día Laura Camila y Óscar Santiago, se conocieron en el trabajo donde Gómez era su jefe. Al principio, la comunicadora se sintió atraída por su carácter, pero todo cambio cuando Laura fue ascendida a un cargo superior.

De acuerdo al testimonio de su mejor amiga, Salomé Salazar, a partir de ese momento comenzaron los celos, la desconfianza y las actitudes posesivas. Gómez revisaba con frecuencia el celular y la computadora de Laura, y cuestionaba sus horarios laborales. La madre de la periodista, Cecilia Osorio, relató que su hija soportó críticas constantes por su manera de vestir y comentarios que afectaron a su autoestima.

Cinco meses antes de su muerte, durante una reunión familiar, la tensión llegó al punto de la agresión física. El hermano de la víctima, Joan Blanco, tuvo que intervenir. Aunque Laura decidió terminar la relación, Gómez insistió en regresar, prometiendo cambiar.

La fatídica noche

El día de la tragedia, la pareja celebraba el grado de Gómez como ingeniero de sistemas junto a un grupo de amigos. Tras visitar un bar en la Zona T, todos se dirigieron al apartamento de Laura, donde continuó la reunión hasta la madrugada. Hacia las cuatro de la mañana, la pareja ingresó a la habitación principal y, según testigos, comenzó una fuerte discusión.

Minutos después, Gómez salió alterado y aseguró que Laura se había lanzado por la ventana. Sin embargo, cuando la Policía llegó al lugar, la ventana estaba cerrada, detalle que de inmediato levantó fuertes sospechas.

El giro forense y la búsqueda de justicia

Dos meses después, el dictamen de Medicina Legal confirmó lo que la familia temía: Laura no se quitó la vida. El informe reveló signos de asfixia mecánica y lucha defensiva, lo que probó que intentó resistirse a su agresor. La causa de muerte fue catalogada como “asfixia mixta” y la manera de muerte, “violenta, orientada a homicidio”.

La Fiscalía sostiene que Gómez aprovechó su fuerza para someter a la periodista, asfixiarla y luego arrojarla al vacío para simular un suicidio. El pasado 21 de agosto fue capturado y, en audiencia, no aceptó los cargos.

Mientras avanza el proceso judicial, la familia de Laura pide que su caso no quede impune y que su historia sirva para visibilizar las violencias que ocurren en el país que, muchas veces, se esconden detrás del silencio y el miedo.