Un colombiano adoptado en Holanda estaría estafando a extranjeros en el país

Durante los años ochenta, miles de niños colombianos salieron del país a tierras de las que quizás nunca habían oído hablar, se fueron de una patria pobre y envuelta en un conflicto social para ir a latitudes en donde la tranquilidad y el progreso eran la rutina diaria.

Muchos niños nacidos en Colombia ni siquiera aprendieron a hablar español en su propia tierra, se fueron con sus rasgos latinos, adoptados por parejas de cabellos rubios, y de tez y ojos claros que solo querían tener un hijo y encontraron en Colombia una posibilidad de alcanzar ese sueño.

Diego Fernando Patiño fue uno de esos niños que corrieron con la fortuna de que una familia los adoptara, una pareja holandesa se encargó hace décadas del chico y le dio el apellido Van Straalen, pero en los últimos días medios de Holanda han denunciado que el hombre ha realizado estafas a extranjeros en la ciudad de Medellín.

Según el diario El Tiempo, el diario De Teleegraf de Holanda, uno de los más importantes de aquel país se encargó de mostrar las diferentes acciones del colombiano en su país de origen, pues en la ciudad de Medellín se encargaba de promover turismo entre extranjeros para luego estafarlos aprovechando el desconocimiento del idioma por parte de los visitantes.

Inicialmente, Patiño se había dado a conocer en el país del nordeste de Europa, supuestamente como un hombre que promovía y abanderaba causas benéficas en Colombia, por ello contactaba a diferentes personas para convencerlas de ayudar a personas necesitadas en Colombia, y un programa televisión emitió una nota en donde se mostraba a Patiño como un hombre de gran corazón y espíritu humanitario, pero inmediatamente la imagen del colombiano comenzó a derrumbarse.

Prontamente se dieron a conocer diferentes quejas de personas que reconocieron al colombiano adoptado por holandeses y lo tildaron de estafador, incluso existe una comunidad de Facebook que denuncia haber sido estafada por él, pero que a pesar de las diferentes acciones legales no han tenido respuesta.

Una víctima denunció que, al no poder estafar turistas por la pandemia, decidió solicitar ayudas para ayudar a personas necesitadas en Medellín, pero este se quedaba con el dinero y solo entregaba bolsas de agua, además, cuando se encargaba de realizar recorridos turísticos como guía de los visitantes extranjeros, los llevaba en estado de alicoramiento y los dejaba en lugares oscuros, negociaba cosas que no cumplía y se iba con el dinero ante la impotencia de los afectados.

Según una tía biológica del holandés adoptado, él llegó a Colombia en el año 2018 y lo primero que hizo fue estafar a su propia familia, además ella asegura que su sobrino dice ser ejecutivo de marketing y promotor de eventos, pero por el momento se desconoce su paradero.