Asfixiada por un fríjol, niña de tres años muere en Bogotá, el trancón le impidió llegar antes hospital
Tras la asfixia con un fríjol, intentaron llevarla al hospital y el tráfico impidió que llegara antes

Tras la asfixia con un fríjol, intentaron llevarla al hospital y el tráfico impidió que llegara antes
Una niña de apenas tres años de edad perdió la vida luego de atragantarse con un fríjol que tenía en la boca, todo ocurrió en la localidad de Kennedy, al sur occidente de Bogotá. El incidente consternó a toda la comunidad.
Importancia de saber hacer maniobras
Ante situaciones como esta, los expertos en salud insisten en la importancia de conocer y aplicar maniobras básicas de primeros auxilios, especialmente la maniobra de Heimlich, que puede salvar vidas en casos de atragantamiento. Saber cómo actuar durante los primeros segundos es determinante, ya que la falta de oxígeno puede causar daños irreversibles en cuestión de minutos y en este caso el deceso. Por ello, los especialistas recomiendan que padres, cuidadores y docentes reciban capacitación básica en reanimación cardiopulmonar (RCP) y saber cómo quitar obstrucciones de vías respiratorias en niños y lactantes.
Además, los organismos de emergencia enfatizan que una respuesta rápida y adecuada puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte. Reconocer los signos de asfixia como la imposibilidad de hablar, toser o respirar y mantener la calma para actuar correctamente son pasos clave. Varias instituciones de salud y organismos de socorro ofrecen talleres gratuitos o de bajo costo en primeros auxilios, una herramienta que todos los hogares deberían considerar como parte esencial de la prevención y el cuidado infantil.
Los hechos que llevaron a la niña y sus familiares a un momento de angustia
Según la versión de sus familiares el hecho se produjo en el interior del hogar donde residía la menor. Lo que su mismo padre cuenta es que la niña jugaba con un fríjol en la boca y debido a un salto que dio y posterior caída la niña empezó a presentar asfixia con el alimento que tenía en la boca. Los familiares, al percatarse de que estaba sufriendo asfixia, intentaron brindar auxilio de inmediato. Los paramédicos del servicio de salud llegaron al lugar, pero pese a los esfuerzos por socorrerla, la pequeña ya no presentaba signos vitales al momento de la atención. Las autoridades confirmaron el deceso en el sitio.
En el afán de salvar a su hija, el padre se subió a un vehículo particular que se ofreció a llevarlo al hospital más cercano, pero pocos minutos después se tuvo que bajar porque, para el vehículo, fue imposible salir del tráfico. Finalmente, una moto los llevó a ambos y lamentablemente ya era muy tarde para la menor.
Reacción de la comunidad y preocupación por la seguridad infantil
El caso ha generado una profunda conmoción entre los vecinos del sector Kennedy, quienes expresan solidaridad con la familia afectada. Asimismo, reaviva la preocupación sobre los riesgos de asfixia en menores cuando ingieren alimentos o pequeños objetos.
Expertos en pediatría suelen advertir que niños de muy corta edad deben ser supervisados al comer, evitar alimentos duros o de tamaño pequeño, como en este caso, un fríjol, que puedan obstruir la vía aérea, y estar atentos a conductas de riesgo como correr o hablar mientras comen.
El trágico desenlace de esta niña de tres años obliga a una reflexión sobre las medidas de prevención que deben adoptar los hogares y cuidadores. Si bien no siempre es posible anticipar un accidente, la educación preventiva y la rápida reacción frente a signos de ahogo pueden marcar la diferencia.
Por el momento los padres de la menor quieren darle sepultura en Sincelejo, de donde son oriundos.