Por: David Ferrer • Colombia.com

Preocupación por “lento progreso” del metro de Bogotá: Empresas involucradas tienen líos en otros países

Con un avance del 35% en la construcción de la primera línea del metro, cuestionan la eficiencia del consorcio a la hora de cumplir con fechas y requisitos. El estado de sus obras en otros países complica el panorama.

Foto: Metro de Bogotá
Foto: Metro de Bogotá

Con un avance del 35% en la construcción de la primera línea del metro, cuestionan la eficiencia del consorcio a la hora de cumplir con fechas y requisitos. El estado de sus obras en otros países complica el panorama.

La construcción de la tan esperada primera línea del metro de Bogotá ha alcanzado un avance del 35% al cierre de 2023, según informes de la Alcaldía de la capital. Aunque el progreso continúa, el consorcio liderado por la China Harbour Engineering Company (CHEC) genera desconfianza debido a interrogantes sobre el desempeño de las empresas que lo conforman en proyectos a gran escala en Colombia y otras partes del mundo.

CHEC, una entidad surgida en 2012 tras la fusión de China Road and Bridge Corporation y China Harbour Engineering Company, afirmó durante el proceso de selección que cuenta con un reconocimiento mundial en el ámbito de la infraestructura. No obstante, casos previos, como el proyecto del ferrocarril en Uganda, que fue reemplazado después de siete años sin avances significativos, y la ciudad portuaria de Colombo en Sri Lanka, identificada como un elefante blanco en 2020, generan preocupaciones.

Documentos internos sugieren que CHEC habría admitido internamente no cumplir con los estándares de seguridad necesarios para el proyecto, según lo establecido en los contratos. Además, la falta de mano de obra colombiana en partes esenciales del metro, con muchos trabajadores provenientes de China, ha suscitado preocupaciones entre las autoridades bogotanas.

La Empresa Metro de Bogotá tomó medidas al imponer una multa de más de 800 millones de pesos al consorcio chino conformado por CHEC y Xi’An Metro en 2023 por incumplir plazos en la entrega de estudios y diseños preliminares, compromisos que debían completarse en diciembre de 2022.

En cuanto a los casos de corrupción, CHEC, con el 85% de participación en el consorcio de la primera línea del metro de Bogotá, ha estado involucrada en escándalos a nivel global. En octubre de 2022, se confirmaron anomalías vinculadas a sobornos en la Administradora Boliviana de Carreteras (ABC), lo que llevó a la destitución del gerente general en Bolivia, Jin Zhengyuan.

CHEC, como filial de China Communications Construcción Company (CCCC), ha sido sancionada por el Banco Mundial en 2009 debido a prácticas fraudulentas en licitaciones, especialmente en la Fase 1 del proyecto de gestión y mejora de carreteras nacionales de Filipinas. En Colombia, CHEC está involucrada en proyectos como la autopista Mar 2, que busca conectar Medellín con el Urabá antioqueño.

En 2018, la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas revisó las recomendaciones de la Coordinadora de Organizaciones Indígenas de la Cuenca Amazónica (Coica) sobre el respeto de los derechos humanos por parte del Gobierno chino.

Se alegaba que se vulneraba el derecho a la vida, incluyendo la protección del medio ambiente. El proyecto Monitoring of the Andean Amazon Project (MAAP) reveló la deforestación de 1.307 hectáreas de bosque durante la construcción de vías de acceso para la mina entre 2009 y 2017.

A pesar de la firma de acuerdos durante la visita del presidente colombiano, Gustavo Petro, a China, fortaleciendo la relación diplomática, estos contratiempos generan preocupación entre ciudadanos y expertos, cuestionando la capacidad de CHEC para cumplir con las expectativas y plazos del proyecto del metro en Bogotá.