Petro arremete contra magistrada que ordenó la captura de Bonilla por haber liberado al expresidente Uribe

Sobre el medio día del jueves, 18 de diciembre, la magistrada Aura Alexandra Rosero Baquero ordenó la captura inmediata de los exministros Ricardo Bonilla y Luis Fernando Velasco por su presunta relación con el escándalo de corrupción de la UNGRD, hecho que parece no haber sido del agrado del presidente Gustavo Petro.

Por medio de su cuenta de X, el mandatario de los colombianos deja entrever su disconformidad con la decisión de la magistrada Rosero contra Ricardo Bonilla, a quien le sacó en cara el haber sido una de las firmantes de la orden de libertad al expresidente Álvaro Uribe, cuando este fue detenido por su condena en primera instancia.

“La magistrada Aura Rosero puso en libertad a Uribe. No calificaré su decisión, pero sentí burlada a la juez de primera instancia.  Ahora lleva a la cárcel al doctor en economía y profesor de profesión Ricardo Bonilla”, expresó el mandatario colombiano.

En su publicación, Petro hizo énfasis en que Bonilla es un hombre mayor con “graves problemas de salud”, razón por la que debería reconsiderarse el hecho de enviarlo a prisión.

“Ricardo Bonilla tiene 76 años de edad y estuvo hace días en UCI, en cuidados intensivos, lo ha puesto en peligro. Jamás ha tenido un solo inconveniente con la justicia. Jamás hizo un cupo indicativo a congresistas”.

Continuando con su defensa a Bonilla, Petro asegura que el exministro de Hacienda solo se reunió con ponentes de la ley del presupuesto y de la comisión interparlamentaria de crédito, que es lo que le corresponde hacer para la aprobación del presupuesto del año 2024.

En ese sentido defendió la entrega de proyectos a través de la UNGRD y dijo que fueron acordes a la ley. 

“Los proyectos que entregaron los parlamentarios de la comisión interparlamentaria a la UNGRD a través de tercera persona, no solo podían solicitarlos, se los permite la constitución, Pero no se aprueban en el presupuesto, allí solo hay partidas globales”, indicó.

Finalmente, el mandatario defendió su administración, asegurando que fue él quien suspendió cualquier financiación de los proyectos solicitados por los congresistas de la comisión interparlamentaria, rechazando así la teoría de que la UNGRD haya sido usada como una especie de plataforma para pavimentar sus reformas. “Yo mismo inmediatamente pedí la renuncia de Olmedo”, resaltó.