El metaverso se toma las aulas: ¿Una nueva vuelta de tuerca en la educación?
Más allá de ser una moda tecnológica, el metaverso promete revolucionar la forma de aprender en Colombia y América Latina. Entre gafas, avatares y entornos inmersivos, esta herramienta busca retener la atención y potenciar el aprendizaje.
Más allá de ser una moda tecnológica, el metaverso promete revolucionar la forma de aprender en Colombia y América Latina. Entre gafas, avatares y entornos inmersivos, esta herramienta busca retener la atención y potenciar el aprendizaje.
El metaverso se ha convertido en un tema central en debates tecnológicos, educativos y empresariales, prometiendo transformar cómo interactuamos y aprendemos. Aunque aún carece de una definición única, se describe como un entorno digital inmersivo que fusiona realidades físicas y virtuales, permitiendo a los usuarios interactuar mediante avatares y tecnologías como gafas y guantes con sensores. Este concepto, más amplio que la realidad aumentada o virtual, busca crear un "universo paralelo" para experiencias realistas.
Un próximo libro, "Decodificando el metaverso: convergencia y oportunidades para América Latina" (2024), destaca la relevancia del metaverso en la región. Publicado por Juslab y la Universidad de Champagnat, aborda temas como la brecha digital y las posibilidades educativas que esta tecnología ofrece.
Según los autores, el metaverso puede revolucionar la enseñanza al crear entornos de aprendizaje dinámicos, colaborativos y atractivos que capturen la atención, un desafío constante en la educación actual. Aunque no se busca reemplazar la interacción humana, sí se pretende complementarla con nuevas formas de experimentar y construir conocimiento, alineándose con tendencias como el e-learning 2.0.
Diversas instituciones en América Latina ya experimentan con esta tecnología. La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) desarrolla proyectos inmersivos para estudiantes de arquitectura, mientras que en Brasil, la plataforma AltspaceVR ofrece clases de idiomas en entornos virtuales.
En Costa Rica, Second Life se utiliza para actividades académicas, y en Colombia, empresas como Conconcreto incursionan en el metaverso, empleando oficinas virtuales para promocionar proyectos inmobiliarios y eliminar barreras geográficas.
A pesar de sus promesas, el metaverso plantea desafíos éticos y sociales. Temas como la privacidad de datos, accesibilidad y formación docente para un uso crítico de estas herramientas requieren atención.
Además, existen riesgos potenciales como la confusión entre realidades o impactos negativos en la comunicación humana. Sin embargo, para muchas empresas e instituciones, el metaverso representa un canal innovador que amplía horizontes y redefine la interacción entre lo físico y lo digital.