COLOMBIANOS EN EL EXTERIOR

Por: Leonardo Alarcón • Colombia.com

Liverpool: Luis Díaz volvió a ser figura de los Reds y anotó en el empate ante el Manchester United

El estadio Old Trafford fue el escenario en el que se encontraron Manchester United y Liverpool, por la fecha 32 de la Premier.

Luis Díaz volvió a celebrar un gol en la casa del Manchester United. Foto: Facebook Liverpool
Luis Díaz volvió a celebrar un gol en la casa del Manchester United. Foto: Facebook Liverpool

El estadio Old Trafford fue el escenario en el que se encontraron Manchester United y Liverpool, por la fecha 32 de la Premier.

Quien diría; a quién se le ocurriría que, en algún momento, un futbolista colombiano se convertiría en figura, en uno de los equipos con más historia del país que se inventó el fútbol. Quien diría que aquel colombiano, nacido en la agreste zona sur del departamento de la Guajira, olvidada por gobiernos, pero acosada por violentos sería, en algún momento, el motor de aquel Liverpool al que un alemán temperamental, pero paternalista, le devolvería la grandeza.

El fútbol, como la vida, habita en la incertidumbre: Lo único seguro, en aquel deporte en el que se enfrentan once contra once es que, en algún momento, terminará.  Y esto parece que se magnificara en aquel fútbol que se practica en aquellas islas a las que llegó aquel guajiro, que impresionó a la vieja Europa, en una Liga de Campeones.

Y este domingo, en el mítico Old Trafford, se encontraron el legendario Manchester United y el rejuvenecido Liverpool, uno muy cerca de consagrarse en la Premier y el otro peleando por un cupo que le permita seguir compitiendo a nivel internacional. Y, pese a la diferencia en puntos, el partido entre estos dos gigantes pareció un cuadro pintado en Venecia, en el siglo XVI.

El marcador, quién diría, lo abrió Luis Díaz, aquel guajiro figura del Liverpool y que sigue sorprendiendo a todo un continente que cada vez es más difícil de sorprender. Su marca, el inglés Kobbie Mainoo, lo olvidó en el cobro de un tiro de esquina y Díaz se desmarcó, siguió el balón, lanzó una media tijera y puso el primero del partido.

Arrancando la segunda parte, un infantil error de Jarell Quansah, le dejó el balón a Bruno Fernández quien, con arco vacío, definió para empatar el juego y levantar el ánimo de los locales, hasta ese momento arrollados por los once de Klopp. Y, en medio de ese despertar, el mismo Mainoo, culpable del gol de Luis Díaz, se le escapó al guajiro y anotó un gol espectacular, para poner a ganar a su equipo.

Los visitantes sintieron el golpe, pero despertaron; los locales entregaron el balón y se defendieron. Anthony, el brasileño, entró y sirvió de tapón, quitándole protagonismo a Luis Díaz. Sin embargo el colombiano tuvo un par de oportunidades más. A 6 del final, Mohammed Salah empató el juego con un cobro de penalti que un engañado Onana no pudo frenar.

Empate a 2 en el teatro de los sueños, que casi, de nuevo, se convierte en pesadilla para Klopp. Ahora el Liverpool tendrá que seguir buscando el título, consciente de que hoy cedió terreno, pero seguro de que aún hay posibilidades de llegar. ¡Como en la vida! Y si usted, amigo lector, creyó que esto es cercano a la poesía, no se equivoque; porque la poesía ocurrió en el terreno de juego, de un proverbial Old Trafford.