Alianza - Junior: el Armando Maestre Pavajeu de Valledupar se quedó sin electricidad en pleno partido

Junior supo aprovechar la desesperación del conjunto vallenato ante las condiciones adversas que se vivieron en la capital del Cesar.

Por: Carlos Guevara • Colombia.com
Edwin Herrera fue quien rompió el celofán en el recinto valduparense. Foto: Twitter @JuniorClubSA
Edwin Herrera fue quien rompió el celofán en el recinto valduparense. Foto: Twitter @JuniorClubSA

Junior supo aprovechar la desesperación del conjunto vallenato ante las condiciones adversas que se vivieron en la capital del Cesar.

El estadio Armando Maestre Pavajeau vivió una tarde de esas en las que pasan de todo, con camiseta nueva, polémica y hasta un apagón. Sí, se fue la luz en pleno partido entre Alianza FC y Junior de Barranquilla, en el cierre de la jornada dominical de la fecha 15 de la Liga BetPlay II-2025. Pero más allá del apagón, el que terminó encendiendo la fiesta fue el ‘Tiburón’, que ganó 0-1 y se trepó nuevamente a la punta del campeonato.

El ambiente en el estadio era una locura. Aunque el juego se disputaba en Valledupar, daba la impresión de que se jugaba en el Metropolitano, porque la afición rojiblanca se tomó las tribunas: cánticos, banderas, luces y todo el sabor 'curramba' se mezclaron en una verdadera fiesta. Y mientras la hinchada cantaba a todo pulmón, los dirigidos por Alfredo Arias buscaban en la cancha el resultado que les devolviera la confianza después de unas fechas con altibajos.

El primer tiempo fue intenso, con opciones para ambos lados, pero también con un momento que dejó a los hinchas de Alianza furiosos, tras una mano clarísima del 'Cacha' Rivera dentro del área que el juez central prefirió ignorar. Era penal, y todo el estadio lo vio, menos el árbitro. Esa decisión terminó pesando en el desarrollo del juego.

Ya en la segunda mitad, el fútbol le dio la espalda a los locales. En una jugada en el área contraria, el árbitro sancionó una mano de un defensor de Alianza y decretó penal a favor de Junior. Edwin Herrera, con la frialdad de un veterano, se encargó de cobrarlo al minuto 39 y mandó el balón al fondo de la red. El 0-1 puso a celebrar a todo Valledupar, o al menos a los que vestían de rojo y verde.

Pero cuando la fiesta apenas comenzaba, el estadio se quedó completamente a oscuras. Un apagón total detuvo el encuentro por más de quince minutos, generando incertidumbre, risas nerviosas y hasta memes en las tribunas.

Los jugadores aprovecharon para hidratarse, mientras los técnicos daban indicaciones a media luz. Cuando regresó la energía en Valledupar, el Junior mostró experiencia, manejó los tiempos y cerró el partido con inteligencia.

Con este triunfo, el equipo barranquillero volvió a lo más alto de la tabla y, de paso, le dio un respiro a su técnico Alfredo Arias, que venía siendo cuestionado. La polémica por el arbitraje sigue viva, pero en Barranquilla poco les importa: el ‘Tiburón’ ganó, es líder y celebró con su nueva y jovial camiseta.