Futbolistas colombianos que pasaron por Boca Juniors con más pena que con gloria

Boca Juniors es una de las instituciones futbolísticas más prestigiosas del mundo con un palmarés que pocos pueden exhibir, es llamado en Argentina el equipo de la ‘mitad más uno´ debido a que cuenta con una inmensa popularidad en su país y también en el mundo.

El equipo xeneixe, llamado así por el origen genovés de sus fundadores llegados a Buenos Aires e instalados en el emblemático barrio de la Boca, ha contado en sus diferentes formaciones con futbolistas colombianos que han logrado triunfar y que se han convertido en ídolos de la hinchada, algo que parecía estar reservado únicamente para argentinos y futbolistas de otras nacionalidades.

Cómo olvidar la gloriosa época del tridente colombiano conformado por Óscar Córdoba, Jorge ´el patrón´ Bermúdez y Mauricio ´Chicho´ Serna, futbolistas que se ganaron un lugar en la historia del club bostero y que la afición recuerda con inmenso cariño.

Los colombianos han logrado dejar una marca difícil de olvidar, pero también varios compatriotas pasaron por el xeneixe con una huella tan frágil que nadie se acuerda de ellos y otros pretenden ser olvidados precisamente por su actuar tan poco acorde a las exigencias de un club de esta categoría.

Algunos de los futbolistas colombianos que llegaron a Boca Juniors llegaron precedidos de gran fama y de grandes actuaciones con sus equipos, pero al llegar al cuadro azul y oro no correspondieron a las expectativas y tuvieron que marcharse sin pena ni gloria, con el rabo entre las piernas y con más de un insulto de la número 12.

John Jairo Tréllez

Descolló en el Campeonato Suramericano juvenil de Paraguay en 1985 y en el de Colombia en 1987, y aunque apareció en el álbum de los mundiales de 1990 y 1994 fue marginado a última hora. 

Estrella en el Atlético Nacional de Medellín, Tréllez, nacido en Turbo, era uno de los dos delanteros que César Luis Menotti quería para el club de la franja amarilla en el pecho, el otro era un tal Ronaldo Nazario De Lima, pero finalmente el técnico excampeón del mundo se inclinó por el antioqueño.

Tréllez no fue el primer nacido en Colombia en formar con Boca Juniors, ya lo habían hecho Walter Perazzo, nacido en Cali, y Carlos Fernando Navarro Montoya, nacido en Medellín, pero ambos hijos de argentinos que jugaron en el fútbol colombiano, y a pesar de que Navarro Montoya, histórico portero del Boca jugó tres partidos con la selección Colombia, tanto él como Perazzo, siempre han sido más argentinos que el asado y el obelisco.

La turbina o pantera, como era apodado John Jairo Tréllez no fue el goleador que esperaban los hinchas, jugó 20 partidos y solo marcó 2 goles, se marchó silenciosamente y sin saberse cómo rugía.

Arley Dinas

Recio y corpulento defensor central caleño que esperaba ser el remplazo de Jorge Bermúdez, pero a diferencia del quindiano, no era patrón y tampoco empleado porque parecía no atender ninguna orden y su funcionamiento no era el mejor, porque cuando se le decía ‘no te dejés ganar la espalda´ la perdía inmediatamente y así entraba el delantero contrario y anotaba. 

Dinas estuvo apenas medio año en Boca, la mayoría en el banco porque nunca se afianzó entre los titulares y regresó a Colombia para jugar en Millonarios.

Breyner Bonilla

Recomendado por el patrón Bermúdez este joven y espigado defensa central llegó a Boca Juniors en 2009 y le bastaron solo 3 partidos para quedar en la historia del club y del fútbol argentino, no precisamente por tres encuentros soñados, sino porque su desempeño no fue de pesadilla, y porque además le dio un planchazo a un rival que hizo retorcer hasta a los más bravos volantes de marca argentinos acostumbrados a fracturas tibias.

Fue tan mala la presencia de este defensor que el locutor argentino del último partido de Breyner Bonilla en Boca atinó a decir: "Pero quién trajo a este colombiano por amor de Dios, no está a la altura de Boca”.