Pelé habría pedido expresamente al Santos no retirar su número, al fallecer

Mucho se ha dicho sobre el legado que Pelé dejó sobre el mundo del fútbol y es que, sin ningún lugar a dudas, el nacido en tres corazones cambió drásticamente lo que era el fútbol hasta el momento en que apareció. Sus gambetas, su velocidad y su cambio de ritmo, lo catapultaron a la cima del fútbol, convirtiéndolo en parte de una especie de panteón al que sólo han llegado dos o tres jugadores de la historia.

 Así su equipo de toda la vida, el Santos, incluso analizaba la idea de retirar el mítico 10, haciéndole una especie de homenaje a ‘O Rei’. Tal como comentábamos aquí en días anteriores, el blanquinegro retiraría el número con el que Neymar saltó a Europa, ya en años más recientes.

Y es que el 10, con el tiempo, se convirtió en el símbolo del jugador habilidoso y esto, también, es un logro que se puede atribuir a Pelé pues, según cuenta la historia, el número se acomodó en su camiseta, como un hecho de azar. Esto ocurrió en 1958, en el mundial de Suecia donde, debido a una demora dentro de la selección de Brasil, provocó que los números de los jugadores fuesen asignados por Lorenzo Villizio, que era parte del comité organizador de la FIFA, durante el evento.

 Villizio, según dicen, organizó los apellidos de manera alfabética y de esta forma distribuyó los números. La 10 le tocó a ese flaco suplente de 17 años a quien, por ese entonces, llamaban ‘Dico’. Es la manera en la que un uruguayo, que trabajaba en la FIFA, cambió para siempre la historia del fútbol. 

El número se lo llevó a Santos y lo dejó en la historia. Unos años después, un pequeño argentino que creció en Villa Fiorito, Buenos Aires, quiso ese número. Y luego el Pibe y Messi, y unos cuántos más… Ahora, con Edson Arantes do Nascimento mirándonos desde arriba, el club de sus amores planeaba retirar el mítico número, para que nadie más lo volviera a usar. Sin embargo, luego de una entrevista encontrada con ‘O Rei’ en vida, el cuadro brasilero decidiría recular.

 La entrevista la entregó el ex jugador en 2017 a un periodista y, según contó el presidente del club, en esa entrevista el mensaje era claro: “No le gustaba la idea”, afirmó el dirigente del cuadro de Sao Paulo. De esta manera, ese 10 que hizo brillar al tricordiano, seguirá circulando, aunque por ahora en poder del venezolano Yeferson Soteldo, dueño actual de la mágica camiseta.