Millonarios se despidió de Modeste Mbami. ¿Quién era este jugador?

Estos últimos días han sido complicados, en torno a figuras del fútbol que se van. El 28 de diciembre pasado, Pelé dijo adiós y dejó este planeta, dejando un vacío con el que aún estamos lidiando. Apenas hace menos de  24 horas, Gianluca Vialli, uno de los grandes jugadores de Italia, con paso por Juventus y Chelsea, se reunió con ‘O Rei’, tras luchar valientemente contra un cáncer de páncreas. Ahora, hace apenas unas horas, se anunció el fallecimiento del futbolista camerunés Modeste Mbami, que marcó el fútbol colombiano, tras su corto paso por Millonarios.

Mbami nació en la ciudad de Yaundé, la capital política de Camerún, en el departamento de Mfoundi. Decidió dedicarse al fútbol y, como muchos de sus compatriotas, encontró el futuro en Francia, tras jugar en las ligas inferiores del Kadji Sports Academy y el Dynamo Duala, ambos clubes de su país de origen.

Como profesional debutó en el Sedan Ardennes, en el año 2000, jugando como volante de recuperación. Era un cabeza de área fuerte y aguerrido, que de vez en cuando alegraba a la hinchada marcando uno que otro gol. En ese mismo año se colgó la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Sidney; la única conseguida por la selección. En 2003 continuó su ascenso, llegando al Paris Saint Germain. No el del jeque. No. Uno quizá un poco más humilde; más terrenal.

Allí jugó 101 partidos y alcanzó a coincidir con uno de los grandes bastiones de la historia reciente del fútbol colombiano: un tal Mario Alberto Yepes. Quizá habiendo alcanzado el techo de su carrera, y ya como ciudadano francés, vistió la camiseta del Olympique de Marsella, entre 2006 y 2009 y salió con destino a España.

Allí, sin saberlo, tendría su segunda conexión con el fútbol de un lejano país sudamericano, de nombre Colombia. Su técnico, en el Almería español, fue Juan Manuel Lillo. Mbami jugó con la UDA 66 partidos y volvió a marcar otro gol. El barco del camerunés siguió moviéndose y lo llevó a la lejana China. Allí prestó sus servicios al Changchun Yatai, donde jugó 15 partidos y gritó gol en 3 ocasiones, siendo este el equipo en el que más anotó.

Se fue a Arabia, donde jugó con la camiseta del Al Ittihad. Ya era el 2012 y el camerunés jugó 30 partidos en total, sin marcar goles. Y entonces, un hasta ahora desconocido Juan Manuel Lillo, llegó al banco de Millonarios y, sin dudarlo, pidió traer al guerrero Modeste Mbami quien, sin pensarlo, se puso la camiseta número 4 de uno de los clubes más importantes de Colombia.

Llegó a escasos partidos de retirarse y, aunque mostró buenas maneras, su paso por el embajador fue fugaz: de apenas 14 partidos. En su momento, incluso, fue resistido por algunos sectores de la prensa y la hinchada. Así, luego de estos 1260 minutos que pisó el campín con el 4 en la espalda, Mbami decidió poner su barco en movimiento, con destino a su segunda casa: Francia.

Entró a formar parte del club Le Havre, donde jugó los últimos 9 partidos de su carrera, para posteriormente retirarse. Hoy, según el reporte médico, habría fallecido por un accidente cerebrovascular. En el recuerdo de los hinchas de Millonarios está el penalti que le cobró a Sebastián Viera, sin afanarse; casi sin tomar impulso. La carrera ya la llevaba en la espalda.